Atrofia muscular
La atrofia muscular es cuando los músculos se desgastan. Generalmente es causado por la falta de actividad física.
Cuando una enfermedad o lesión dificulta o imposibilita mover un brazo o una pierna, la falta de movilidad puede provocar la pérdida de masa muscular. Con el tiempo, sin movimientos regulares, su brazo o pierna pueden comenzar a parecer más pequeños pero no más cortos que el que puede mover.
En algunos casos, el desgaste muscular puede revertirse con una dieta adecuada, ejercicio o fisioterapia.
Síntomas de atrofia muscular
Puede tener atrofia muscular si:
- Uno de sus brazos o piernas es notablemente más pequeño que el otro.
- Estás experimentando una marcada debilidad en una extremidad.
- Has estado físicamente inactivo durante mucho tiempo.
Llame a su médico para programar un examen médico completo si cree que puede tener atrofia muscular o si no puede moverse normalmente. Es posible que tenga una afección no diagnosticada que requiera tratamiento.
Causas de atrofia muscular
Los músculos no utilizados pueden desgastarse si no está activo. Pero incluso después de que comienza, este tipo de atrofia a menudo se puede revertir con ejercicio y una mejor nutrición.
La atrofia muscular también puede ocurrir si está postrado en cama o no puede mover ciertas partes del cuerpo debido a una afección médica. Los astronautas, por ejemplo, pueden experimentar atrofia muscular después de unos días de ingravidez.
Otras causas de atrofia muscular incluyen:
- falta de actividad física por un período prolongado de tiempo
- envejecimiento
- Miopatía asociada al alcohol, dolor y debilidad en los músculos debido al consumo excesivo de alcohol durante largos períodos de tiempo.
- quemaduras
- lesiones, como un manguito rotador roto o huesos rotos
- desnutrición
- lesiones de la médula espinal o nervios periféricos
- carrera
- terapia con corticosteroides a largo plazo
Algunas afecciones médicas pueden hacer que los músculos se desgasten o dificultar el movimiento y provocar atrofia muscular. Éstos incluyen:
- La esclerosis lateral amiotrófica (ELA), también conocida como enfermedad de Lou Gehrig, afecta las células nerviosas que controlan el movimiento muscular voluntario
- dermatomiositis, causa debilidad muscular y erupción cutánea
- Síndrome de Guillain-Barré, una afección autoinmune que conduce a inflamación nerviosa y debilidad muscular.
- esclerosis múltiple, una afección autoinmune en la que el cuerpo destruye las cubiertas protectoras de los nervios
- distrofia muscular, una afección hereditaria que causa debilidad muscular
- neuropatía, daño a un nervio o grupo nervioso, que resulta en la pérdida de la sensibilidad o la función
- osteoartritis, causa movimiento reducido en las articulaciones
- polio, una enfermedad viral que afecta el tejido muscular que puede conducir a la parálisis
- polimiositis, una enfermedad inflamatoria
- artritis reumatoide, una enfermedad autoinmune inflamatoria crónica que afecta las articulaciones
- atrofia muscular espinal, una afección hereditaria que hace que los músculos de los brazos y las piernas se desgasten
¿Cómo se diagnostica la atrofia muscular?
Si la atrofia muscular es causada por otra afección, es posible que deba someterse a pruebas para diagnosticar la afección.
Su médico le solicitará su historial médico completo. Probablemente se le pedirá que:
- Cuénteles sobre lesiones viejas o recientes y condiciones médicas previamente diagnosticadas
- enumere las recetas, los medicamentos de venta libre y los suplementos que está tomando
- dar una descripción detallada de sus síntomas
Su médico también puede ordenar pruebas para ayudar con el diagnóstico y descartar ciertas enfermedades. Estas pruebas pueden incluir:
- análisis de sangre
- Rayos X
- resonancia magnética (MRI)
- tomografía computarizada (TC)
- estudios de conducción nerviosa
- biopsia muscular o nerviosa
- electromiografía (EMG)
Su médico puede derivarlo a un especialista dependiendo de los resultados de estas pruebas.
¿Cómo se trata la atrofia muscular?
El tratamiento dependerá de su diagnóstico y la gravedad de su pérdida muscular. Cualquier condición médica subyacente debe ser abordada. Los tratamientos comunes para la atrofia muscular incluyen:
- ejercicio
- terapia física
- terapia de ultrasonido
- cirugía
- cambios en la dieta
Los ejercicios recomendados pueden incluir ejercicios acuáticos para facilitar el movimiento.
Los fisioterapeutas pueden enseñarle las formas correctas de hacer ejercicio. También pueden mover sus brazos y piernas por usted si tiene problemas para moverse.
La terapia de ultrasonido es un procedimiento no invasivo que utiliza ondas sonoras para ayudar en la curación.
Si sus tendones, ligamentos, piel o músculos están demasiado tensos y le impiden moverse, puede ser necesaria una cirugía. Esta condición se llama deformidad de contractura.
La cirugía puede corregir la deformidad de la contractura si su atrofia muscular se debe a la desnutrición. También puede corregir su condición si un tendón desgarrado causó atrofia muscular.
Si la desnutrición es la causa de la atrofia muscular, su médico puede sugerir cambios en la dieta o suplementos.
Para llevar
El desgaste muscular o la atrofia generalmente es causada por no poder ejercitar regularmente los músculos. Su incapacidad para moverse puede deberse a una lesión o una condición de salud subyacente.
La atrofia muscular a menudo se puede revertir a través del ejercicio regular y una nutrición adecuada, además de recibir tratamiento para la afección que lo está causando.