Visión general
La hiperinsulinemia es niveles anormalmente altos de insulina en su cuerpo. La insulina es una hormona que crea el páncreas. Esta hormona ayuda a mantener los niveles adecuados de azúcar en la sangre.
La hiperinsulinemia no se considera diabetes si es el único síntoma. Sin embargo, ambos pueden ser causados por la resistencia a la insulina. Por lo tanto, es común que esta afección esté relacionada con la diabetes tipo 2.
¿Cuales son los sintomas?
La hiperinsulinemia puede no tener ningún síntoma notable. Sin embargo, algunos síntomas posibles pueden incluir:
- los antojos de azúcar
- aumento de peso inusual
- hambre frecuente
- hambre excesiva
- problemas con la concentración
- ansiedad o sentimientos de pánico
- falta de enfoque o ambición
- cansancio extremo
- hipoglucemia o bajo nivel de azúcar en la sangre
Los síntomas en bebés y niños pequeños pueden incluir:
- dificultad para alimentarse
- irritabilidad extrema
- letargo o sin energía
¿Cuales son las causas?
La causa típica de la hiperinsulinemia es la resistencia a la insulina. La resistencia a la insulina es lo que sucede cuando su cuerpo no responde correctamente a la insulina. Esta respuesta incorrecta hace que su cuerpo necesite que el páncreas produzca más insulina.
A medida que su páncreas produce más insulina, su cuerpo continúa resistiendo y respondiendo incorrectamente a los niveles más altos de insulina. Su páncreas necesitará continuamente hacer más para compensar. Eventualmente, su páncreas no podrá mantenerse al día con la cantidad de insulina que su cuerpo necesita para mantener su nivel de azúcar en la sangre a un nivel saludable. La resistencia a la insulina puede conducir eventualmente a la diabetes tipo 2.
Las causas menos comunes de esta afección son insulinoma y nesidioblastosis. El insulinoma es un tumor raro de las células del páncreas que producen insulina.
La nesidioblastosis es cuando el páncreas produce demasiadas células que producen insulina.
La hiperinsulinemia también puede desarrollarse después de una cirugía de bypass gástrico. La teoría es que las células se han vuelto demasiado grandes y activas para el cuerpo, pero el cuerpo ha cambiado significativamente después del bypass. Los médicos no están completamente seguros de por qué sucede esto.
Otras causas incluyen:
- predisposición genética
- antecedentes familiares de hipertensión o presión arterial alta
¿Cómo se diagnostica?
La hiperinsulinemia generalmente se diagnostica a través de un análisis de sangre que se toma cuando está en ayunas. También se puede diagnosticar cuando su médico está buscando otras afecciones como diabetes.
¿Cuáles son las opciones de tratamiento?
El tratamiento para la hiperinsulinemia comienza tratando cualquier cosa que la esté causando. Esto es particularmente cierto si su condición es causada por insulinoma o nesidioblastosis.
Su tratamiento también puede incluir una combinación de medicamentos, cambios en el estilo de vida y posiblemente cirugía. Estos cambios en el estilo de vida incluyen dieta y ejercicio.
Medicamentos
Los medicamentos utilizados para tratar esta afección son iguales o similares a los medicamentos utilizados para tratar la diabetes. Sin embargo, los medicamentos deben usarse solo si la dieta y el ejercicio no son suficientes para controlar la afección.
Algunos medicamentos pueden empeorar esta afección. Es importante discutir cada medicamento con su médico. También es importante que todos sus médicos conozcan todos los medicamentos que toma y todas sus afecciones médicas.
Ejercicio
El ejercicio o cualquier actividad física pueden ser efectivos para mejorar la sensibilidad de su cuerpo a la insulina. Esta mejora reduce la resistencia a la insulina, una causa principal de hiperinsulinemia. El ejercicio también puede reducir la obesidad, que puede ser una causa subyacente de esta afección.
Discuta los tipos de ejercicio que debe intentar mientras trata esta afección con su médico. Esto se debe a que algunos ejercicios o la intensidad de algunos ejercicios pueden agravar su condición en lugar de mejorarla.
Hay dos tipos principales de ejercicios que se recomiendan para el tratamiento de la hiperinsulinemia. Son:
- Ejercicios de resistencia. Este tipo se enfoca en un grupo muscular a la vez. Esto debería incluir un bajo número de repeticiones y períodos de descanso significativos en el medio.
- Ejercicio aerobico. Apunte a la intensidad de leve a moderada para obtener los resultados más efectivos. Algunos buenos ejercicios aeróbicos para esta afección incluyen caminar, nadar y trotar.
También se recomienda el ejercicio HIIT. Es una forma de ejercicio aeróbico. Alterna entre series cortas de alta intensidad y series de baja intensidad, que ayudan con la recuperación.
Dieta
La dieta es particularmente importante en cualquier tratamiento, así como con el tratamiento de la hiperinsulinemia. Una dieta saludable puede ayudar a regular mejor las funciones generales de su cuerpo y reducir el exceso de peso. También puede ayudar a regular sus niveles de glucosa e insulina.
Hay tres dietas preferidas para el control glucémico y el tratamiento de la hiperinsulinemia. Son:
- la dieta mediterránea
- una dieta baja en grasas
- una dieta baja en carbohidratos
Estas dietas pueden ayudar con su control glucémico, lo que mejorará la respuesta de insulina de su cuerpo. Se debe evitar una dieta alta en proteínas. Las dietas altas en proteínas pueden ayudar con algunas formas de diabetes, pero pueden aumentar la hiperinsulinemia.
Cada una de estas dietas se compone principalmente de frutas, granos integrales, verduras, fibra y carnes magras. Asegúrese de analizar cualquier cambio en la dieta con su médico antes de comenzar un nuevo plan de dieta.
¿Hay alguna complicación con esta afección?
La hiperinsulinemia puede causar niveles bajos de azúcar en la sangre. El nivel bajo de azúcar en la sangre puede causar varias complicaciones graves. Estas complicaciones pueden incluir:
- convulsiones
- coma
- problemas de función cognitiva (especialmente en niños pequeños)
¿Cuál es la perspectiva?
La hiperinsulinemia se puede controlar y mantener bajo control. Sin embargo, es importante tener chequeos regulares con su médico. Estos chequeos permitirán un diagnóstico oportuno. Cuanto antes se diagnostique y trate esta afección, es menos probable que tenga complicaciones graves.
