Visión general
La leucemia mieloide crónica (CML) es un tipo de cáncer que afecta la sangre y la médula ósea. También se le puede llamar leucemia mielógena crónica, leucemia granulocítica crónica o leucemia mielocítica crónica.
La mayoría de los casos de CML se tratan con terapia con inhibidor de tirosina quinasa (TKI). Los TKI son una clase de medicamentos que se dirigen a ciertos tipos de células cancerosas.
En algunos casos, su médico puede aconsejarle que cambie de un tipo de TKI a otro. También pueden recomendar otros tratamientos además de o en lugar de TKI, como la quimioterapia y el trasplante de células madre.
Aquí hay algunas cosas a tener en cuenta antes de cambiar de tratamiento.
Varios factores afectan sus opciones de tratamiento
El plan de tratamiento que recomiende su médico dependerá de varios factores, que incluyen:
- La fase del cáncer. La CML tiene tres fases: fase crónica, fase acelerada y fase de crisis blástica. Se utilizan diferentes tratamientos para tratar diferentes fases.
- Su historial de tratamiento. Si recibió tratamientos anteriores para la CML, su médico tendrá en cuenta cómo respondió a esos tratamientos.
- Su edad, estado general de salud e historial médico. Si está embarazada, es mayor o tiene antecedentes de ciertas afecciones médicas, puede tener un mayor riesgo de sufrir los efectos secundarios de ciertos tratamientos.
- Sus necesidades personales, límites y preferencias. Hable con su médico sobre cualquier limitación personal, social o económica que pueda afectar su capacidad de seguir ciertos planes de tratamiento.
Si su plan de tratamiento no funciona, es difícil de seguir o está causando efectos secundarios graves, su médico puede recomendarle cambios. Si está embarazada o quiere quedar embarazada, eso también puede afectar sus opciones de tratamiento.
Después del tratamiento según lo prescrito
Si su plan de tratamiento actual no funciona, su médico podría preguntarle qué tan de cerca lo ha estado siguiendo.
Es importante seguir su plan de tratamiento tal como lo recetó su médico. Saltarse o faltar dosis de medicamentos reduce su efectividad.
Antes de que su médico haga cambios, podrían alentarlo a seguir su plan actual más de cerca. Si le resulta difícil mantenerse en el camino, informe a su médico. Podrían ajustar su tratamiento u ofrecerle consejos para ayudarlo a manejar.
Los diferentes tratamientos pueden causar diferentes efectos secundarios
Los tratamientos para la CML pueden causar efectos secundarios como fatiga, náuseas, vómitos y diarrea. Algunos tipos de tratamiento pueden causar efectos secundarios más graves, aunque esto es raro.
Antes de probar un nuevo tratamiento, pregúntele a su médico sobre el riesgo de efectos secundarios. Si cambia de un tratamiento a otro, puede experimentar más, menos o efectos secundarios diferentes. Su médico puede hablar con usted sobre los beneficios y riesgos de cambiar de tratamiento.
Si cree que podría estar experimentando efectos secundarios del tratamiento, informe a su médico. Podrían ajustar su plan de tratamiento o recomendar otras estrategias para ayudar a prevenir o aliviar sus efectos secundarios.
Su riesgo de interacciones farmacológicas puede cambiar
Los tipos de medicamentos, suplementos y alimentos pueden interactuar con ciertos tratamientos. En algunos casos, esas interacciones pueden hacer que el tratamiento sea menos efectivo o aumentar el riesgo de efectos secundarios.
Antes de comenzar un nuevo tratamiento, pregunte a su médico y farmacéutico si hay algún medicamento, suplemento o alimento que deba evitar durante el tratamiento. Hágales saber acerca de los medicamentos y suplementos que toma actualmente.
Puede experimentar síntomas de abstinencia
Si ha estado tomando TKI y deja de usarlos, puede desarrollar síntomas de abstinencia, como erupción cutánea o dolor musculoesquelético.
Antes de dejar de usar cualquier medicamento, consulte a su médico y farmacéutico sobre el riesgo de abstinencia. Pueden ayudarlo a reconocer y controlar los posibles síntomas de abstinencia.
El tratamiento puede ser más o menos costoso
El costo del tratamiento puede variar ampliamente, dependiendo de:
- los medicamentos específicos que recibe
- su cobertura de seguro de salud
- su elegibilidad para programas de apoyo financiero
Cambiar de un tratamiento a otro podría aumentar o disminuir el costo de la atención.
Si tiene seguro de salud, considere contactar a su proveedor de seguro para saber qué tratamientos están cubiertos. Pregúnteles cómo podrían cambiar sus costos de bolsillo si cambia los medicamentos.
Si le preocupa su capacidad para pagar el tratamiento, informe a su médico. En algunos casos, pueden ajustar su plan de tratamiento. Su médico o farmacéutico también puede conocer los descuentos patrocinados por el fabricante u otros programas de apoyo financiero para los que podría ser elegible.
Para llevar
Si su tratamiento actual de CML no está funcionando, es probable que su médico le aconseje que cambie de medicamentos. Antes de probar un nuevo tratamiento, hable con su médico sobre el riesgo de efectos secundarios, interacciones y el costo de la atención.
Si tiene preguntas o inquietudes sobre su plan de tratamiento recomendado, informe a su médico. Pueden ayudarlo a comprender y evaluar sus opciones de tratamiento.