Visión general
Debido a que la policitemia vera (PV) es un tipo raro de cáncer de sangre, a menudo se diagnostica cuando consulta a su médico por otros motivos.
Para diagnosticar la PV, su médico le hará un examen físico y un análisis de sangre. También pueden realizar una biopsia de médula ósea.
Examen físico
Un diagnóstico de PV generalmente no es el resultado de un examen físico. Pero su médico puede observar síntomas de la enfermedad durante una visita de rutina.
Algunos síntomas físicos que su médico puede reconocer son sangrado de las encías y un tono rojizo en su piel. Si tiene síntomas o su médico sospecha PV, lo más probable es que examinen y palpen su bazo e hígado para determinar si están agrandados.
Análisis de sangre
Existen tres análisis de sangre principales que se utilizan para diagnosticar la PV:
Conteo sanguíneo completo (CBC)
Un CBC mide la cantidad de glóbulos rojos y blancos y plaquetas en su sangre. También le dirá a su médico cuál es su nivel de hemoglobina en el torrente sanguíneo.
La hemoglobina es una proteína rica en hierro que ayuda a los glóbulos rojos a transportar oxígeno desde los pulmones al resto del cuerpo. Y si tiene PV, su nivel de hemoglobina se elevará. Por lo general, cuantos más glóbulos rojos tenga, mayor será su nivel de hemoglobina.
En adultos, un nivel de hemoglobina superior a 16.0 gramos por decilitro (g / dL) en mujeres o 16.5 g / dL en hombres puede indicar PV.
Un CBC también medirá su hematocrito. El hematocrito es el volumen de sangre que se compone de glóbulos rojos. Si tiene PV, un porcentaje más alto de lo normal de su sangre estará compuesto por glóbulos rojos. En adultos, un hematocrito mayor del 48 por ciento en mujeres o mayor del 49 por ciento en hombres puede indicar PV, según la Organización Mundial de la Salud.
Frotis de sangre
Una muestra de sangre observa su muestra de sangre bajo un microscopio. Esto puede mostrar el tamaño, la forma y el estado de las células sanguíneas. Puede detectar glóbulos rojos y blancos anormales, junto con plaquetas, que pueden estar relacionados con mielofibrosis y otros problemas de médula ósea. La mielofibrosis es una cicatriz grave en la médula ósea que puede desarrollarse como una complicación de la PV.
Prueba de eritropoyetina
Usando una muestra de sangre, una prueba de eritropoyetina mide la cantidad de la hormona eritropoyetina (EPO) en su sangre. El EPO es producido por las células en los riñones y envía señales a las células madre en la médula ósea para producir más glóbulos rojos. Si tiene PV, su nivel de EPO debe ser bajo. Esto se debe a que su EPO no impulsa la producción de células sanguíneas. En cambio, una mutación del gen JAK2 está impulsando la producción de células sanguíneas.
Pruebas de médula ósea
Las pruebas de médula ósea pueden determinar si su médula ósea está produciendo cantidades normales de células sanguíneas. Si tiene PV, su médula ósea está produciendo demasiados glóbulos rojos y la señal para producirlos no se apaga.
Existen dos tipos principales de pruebas de médula ósea:
- aspiración de médula ósea
- biopsia de médula ósea
Durante una aspiración de médula ósea, se extrae una pequeña cantidad de la parte líquida de la médula ósea con una aguja. Para una biopsia de médula ósea, se extrae una pequeña cantidad de la parte sólida de la médula ósea.
Estas muestras de médula ósea se envían a un laboratorio para que las analice un hematólogo o un patólogo. Estos especialistas analizarán las biopsias y enviarán a su médico los resultados dentro de unos días.
Gen JAK2
El descubrimiento del gen JAK2 y su mutación JAK2 V617F en 2005 fue un gran avance para aprender sobre PV y poder diagnosticarlo.
Alrededor del 95 por ciento de las personas con PV tienen esta mutación genética. Los investigadores han descubierto que las mutaciones JAK2 también juegan un papel importante en otros cánceres de sangre y problemas de plaquetas. Estas enfermedades se conocen como neoplasias mieloproliferativas (MPN).
La anomalía genética se puede detectar tanto en su sangre como en su médula ósea, lo que requiere una muestra de sangre o una muestra de médula ósea.
Debido al descubrimiento de la mutación del gen JAK2, los médicos pueden diagnosticar más fácilmente la PV con un CBC y una prueba genética.
La comida para llevar
Aunque la PV es poco frecuente, hacerse un análisis de sangre es una de las mejores maneras de obtener un diagnóstico y tratamiento tempranos. Si su médico determina que usted tiene PV, hay formas de controlar la enfermedad. Su médico le hará recomendaciones basadas en su edad, la progresión de la enfermedad y su estado general de salud.