¿Qué es una prueba de anticuerpos antitiroglobulina?
Su tiroides es una glándula ubicada en su cuello. Libera hormonas que controlan su metabolismo. Produce varias proteínas diferentes, incluida la tiroglobulina. Su tiroides usa tiroglobulina para producir las hormonas tiroideas activas.
Si tiene una enfermedad autoinmune, puede interrumpir su producción de tiroglobulina. Una condición autoinmune ocurre cuando su sistema inmunitario crea anticuerpos que atacan las células sanas de su cuerpo. Cuando su sistema inmunitario ataca la tiroides, a menudo se dirige a la tiroglobulina. Esto hace que produzca anticuerpos antitiroglobulina. Su médico puede ordenar una prueba de anticuerpos antitiroglobulina para verificar el nivel de estos anticuerpos en el torrente sanguíneo. Un nivel alto puede indicar una condición autoinmune
¿Por qué se ordena una prueba de anticuerpos antitiroglobulina?
Su médico puede ordenar una prueba de antitiroglobulina si tiene síntomas de un trastorno de la tiroides, como:
- fatiga
- aumento de peso inexplicable
- estreñimiento
- piel seca
Su médico también puede ordenarlo si desarrolla un bocio, una condición que ocurre cuando su glándula tiroides se agranda. También pueden pedirlo si sospechan que tiene un trastorno autoinmune, como la enfermedad de Graves o la tiroiditis de Hashimoto. Puede ayudarlos a verificar la función tiroidea deteriorada.
¿Cómo debe prepararse para el examen?
Para una prueba de anticuerpos antitiroglobulina, deberá extraer una muestra de sangre. Su médico le dirá cómo prepararse. Es posible que le pidan que evite comer o beber algo durante varias horas de antemano. También pueden pedirle que deje de tomar ciertos medicamentos que pueden interferir con los resultados de la prueba o la extracción de sangre. Por ejemplo, pueden pedirle que evite tomar anticoagulantes, como warfarina o incluso multivitaminas.
Informe a su médico sobre todos los medicamentos que toma, incluidos los medicamentos recetados y de venta libre. No deje de tomar sus medicamentos sin hablar primero con su médico.
¿Cómo se administra la prueba?
Una enfermera o técnico de laboratorio extraerá una muestra de su sangre en un entorno clínico. Es probable que usen una aguja pequeña para extraerla de una vena de su brazo. Lo recogerán en un tubo y lo enviarán a un laboratorio para su análisis. Su médico le informará cuando los resultados de su prueba estén disponibles.
¿Cuáles son los riesgos de la prueba?
Para la mayoría de las personas, esta prueba implica riesgos mínimos. Son comunes a todos los análisis de sangre de rutina. Por ejemplo, puede experimentar molestias cuando le extraen sangre. Puede desarrollar algo de dolor, latidos o hematomas en el sitio de punción. Si la enfermera o el técnico tiene problemas para extraer una muestra de su sangre, es posible que deba inyectar la aguja varias veces.
Otros riesgos incluyen:
- aturdimiento o desmayo
- sangrado excesivo en el sitio de punción
- acumulación de sangre debajo de la piel, conocida como hematoma
- desarrollo de una infección donde la aguja rompe la piel
- inflamación de su vena, conocida como flebitis
Para la mayoría de las personas, los beneficios potenciales de la prueba superan los riesgos.
¿Qué significan los resultados de la prueba?
Los resultados normales de esta prueba son "negativos". Si recibe resultados negativos, eso significa que no se encontraron anticuerpos antitiroglobulina en su muestra de sangre. Si tiene pequeñas cantidades en la sangre, puede ser un signo de ciertos problemas de salud, como:
- Diabetes tipo 1
- anemia perniciosa, una caída en los glóbulos rojos causada por una deficiencia de vitamina B-12
- enfermedades vasculares del colágeno, como la artritis reumatoide y la esclerodermia
- cáncer de tiroides
Si tiene altos niveles de anticuerpos antitiroglobulina en la sangre, puede ser un signo de un trastorno autoinmune grave, como la enfermedad de Graves o la tiroiditis de Hashimoto.
En algunos casos, puede tener anticuerpos antitiroglobulina en la sangre sin complicaciones específicas. Si el resultado de estos anticuerpos es positivo y su médico no puede identificar una causa subyacente, es posible que lo vigilen en busca de problemas de salud emergentes.
Su médico puede ayudarlo a comprender los resultados de su prueba. Sus pasos de seguimiento recomendados dependerán de su diagnóstico específico. Por ejemplo, pueden recomendar pruebas adicionales u opciones de tratamiento. Pídale a su médico más información sobre los resultados de su prueba, su condición y los próximos pasos.