Efectos Secundarios Del Tratamiento De La CLL: Consejos Y Más

Tabla de contenido:

Efectos Secundarios Del Tratamiento De La CLL: Consejos Y Más
Efectos Secundarios Del Tratamiento De La CLL: Consejos Y Más

Vídeo: Efectos Secundarios Del Tratamiento De La CLL: Consejos Y Más

Vídeo: Efectos Secundarios Del Tratamiento De La CLL: Consejos Y Más
Vídeo: ACIDO HIALURONICO | NARIZ | LABIOS | OJERAS | EFECTOS SECUNDARIOS | CASERO | 2019 | DOCTOR LEMUS 2024, Mayo
Anonim

Los tratamientos para la leucemia linfocítica crónica (CLL) pueden destruir efectivamente las células cancerosas, pero también pueden dañar las células normales. Los medicamentos de quimioterapia a menudo provocan efectos secundarios, pero las terapias dirigidas y las inmunoterapias también pueden causar efectos secundarios.

El revestimiento de la boca, la garganta, el estómago y los intestinos son particularmente vulnerables al daño debido a la quimioterapia. Muchos tratamientos de CLL también pueden dañar las células del sistema inmunitario, lo que puede dejarlo en un mayor riesgo de contraer una infección grave.

Los efectos secundarios más comunes del tratamiento de la CLL incluyen:

  • náuseas y vómitos
  • Diarrea
  • perdida de cabello
  • cambios en el gusto o el olfato
  • pérdida de apetito
  • estreñimiento
  • fatiga
  • dolor de cuerpo
  • erupción
  • úlceras de boca
  • recuentos bajos de células sanguíneas, que pueden causar sangrado y hematomas
  • fiebre y escalofríos
  • reacciones en el sitio de infusión

Los efectos secundarios pueden ocurrir con cualquiera de los tratamientos para la CLL, pero la experiencia de cada persona será diferente. Junto con estos ocho consejos, su equipo de atención médica puede ayudarlo a controlar proactivamente los efectos secundarios de su tratamiento.

1. Tome medidas para minimizar las infecciones

Uno de los efectos secundarios más graves del tratamiento es el daño al sistema inmunitario del cuerpo. Su médico controlará sus recuentos de células sanguíneas a menudo mientras recibe quimioterapia. Es crucial que se cuide adecuadamente para minimizar las posibilidades de contraer una infección, ya sea causada por virus, bacterias, hongos o parásitos.

Aquí hay algunos pasos que puede seguir:

  • Lávese las manos frecuente y minuciosamente con agua y jabón.
  • Evite estar cerca de niños y multitudes de personas.
  • Evite el uso de termómetros rectales, supositorios y enemas, ya que pueden dañar el área rectal y permitir que entren bacterias dañinas en el cuerpo.
  • Cocine bien todas las carnes y a la temperatura adecuada recomendada.
  • Lave bien todas las frutas y verduras frescas antes de consumirlas.
  • Hable con su médico acerca de vacunarse antes de comenzar el tratamiento.
  • Use una máscara que cubra su boca y nariz cuando esté en un lugar público.
  • Lave todos los cortes y raspaduras de inmediato con agua tibia y jabón.

2. Participar en ejercicio ligero

El ejercicio puede ayudar a aliviar la fatiga, las náuseas y el estreñimiento. También puede mejorar tu apetito y tu estado de ánimo general. Un poco de ejercicio ligero puede ser muy útil.

Algunas ideas de ejercicios a considerar incluyen:

  • yoga
  • Qigong
  • caminando
  • nadando
  • rutinas de entrenamiento aeróbico ligero o de fuerza

Pídale a su equipo de atención médica una derivación a un fisioterapeuta o instructor de acondicionamiento físico que conozca los programas de acondicionamiento físico para personas con cáncer. Los grupos locales de apoyo para el cáncer también pueden ayudarlo a encontrar un grupo de acondicionamiento físico. Siempre consulte con su médico antes de comenzar un programa de ejercicios.

3. Protégete de las lesiones

Las plaquetas bajas son otra preocupación con los tratamientos de CLL. Las plaquetas son necesarias para formar coágulos sanguíneos, por lo que los niveles bajos de plaquetas pueden provocar hematomas y sangrado fáciles.

Siga estos consejos para protegerse de las lesiones:

  • Cepille sus dientes con un cepillo de dientes extra suave.
  • Use una afeitadora eléctrica en lugar de una afeitadora.
  • Evita caminar descalzo.
  • Evite usar aspirina u otros medicamentos que puedan causar problemas de sangrado.
  • Evite los deportes de contacto u otras actividades con alto riesgo de lesiones.
  • No beba alcohol sin la aprobación de su médico.
  • Tenga cuidado de no quemarse al planchar o cocinar.

4. Toma medicamentos

La quimioterapia a menudo afecta el sistema digestivo. Las náuseas y los vómitos son efectos secundarios comunes, aunque algunas personas también experimentan estreñimiento y diarrea.

Afortunadamente, los efectos secundarios del sistema digestivo se pueden controlar con medicamentos efectivos. Esto incluye antieméticos, medicamentos contra la diarrea y medicamentos para el estreñimiento.

5. Duerme lo suficiente

A veces, sus tratamientos pueden ser físicamente agotadores. Pero dormir puede ser difícil debido al estrés y la ansiedad.

Estas sugerencias pueden ayudarlo a mejorar la calidad de su sueño y reducir la fatiga:

  • Relájese adecuadamente antes de acostarse tomando un baño tibio y escuchando música relajante.
  • Acuéstate a la misma hora todas las noches.
  • Mantenga la habitación fresca, tranquila y oscura.
  • Invierta en un cómodo colchón y ropa de cama.
  • Evite la cafeína y el alcohol antes de acostarse.
  • Use técnicas para aliviar el estrés, como imágenes guiadas, meditación, respiración profunda y ejercicios de relajación muscular antes de acostarse.
  • Evite el teléfono celular y las pantallas de la computadora antes de acostarse.
  • Evita las siestas durante el día; Si necesita tomar una siesta, intente limitar las siestas a 30 minutos.

6. Reúnase con un nutricionista

Muchos tratamientos contra el cáncer causan pérdida de apetito, náuseas, vómitos e incapacidad para absorber nutrientes. Esto a veces puede conducir a la desnutrición.

Debido al bajo recuento de glóbulos rojos, es vital comer suficiente hierro. Trate de comer alimentos con alto contenido de hierro, como verduras de hoja verde, mariscos, legumbres, chocolate negro, quinua y carne roja. Si no come carne o pescado, puede ayudar a la absorción de hierro al incluir una fuente de vitamina C, como los cítricos.

Si es posible, reúnase con un nutricionista o dietista para crear un plan de dieta que garantice que obtenga suficientes calorías, líquidos, proteínas y nutrientes. Asegúrese de beber también mucha agua. La deshidratación puede empeorar la fatiga.

7. Sepa cuándo llamar a su médico

Hable con su médico sobre qué signos y síntomas justifican una visita al médico y qué se considera una situación de emergencia. La fiebre, escalofríos o signos de infección como enrojecimiento y dolor pueden ser graves.

Escriba el número del consultorio de su médico en algún lugar al que se pueda acceder fácilmente y que también se pueda programar en su teléfono celular.

8. Busque apoyo

Pida ayuda a familiares o amigos con tareas difíciles. Las personas a menudo quieren ayudar, pero no saben qué pueden hacer por usted. Dales una tarea específica para hacer en tu casa. Esto podría incluir cortar el césped, limpiar la casa o hacer mandados.

Los grupos de apoyo pueden darle la oportunidad de discutir sus efectos secundarios con otras personas con CLL que están pasando por una experiencia similar. Comuníquese con el capítulo local de la Sociedad de Leucemia y Linfoma para obtener una derivación a un grupo de apoyo local.

La comida para llevar

Al comenzar el tratamiento, es importante que comunique lo que siente a su equipo de atención médica. Esto los ayudará a adaptar su terapia si es necesario y ayudará a mejorar su calidad de vida general. Pregúntele a su hematólogo u oncólogo sobre los posibles efectos secundarios de su régimen de tratamiento específico y cómo manejarlos.

Recomendado: