Infecciones En El Embarazo: Pielonefritis Aguda

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Infecciones En El Embarazo: Pielonefritis Aguda
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Vídeo: INFECCIÓN DEL TRACTO URINARIO EN EL EMBARAZO 2024, Noviembre
Anonim

¿Qué es la pielonefritis aguda?

La pielonefritis aguda es una infección bacteriana de los riñones que afecta hasta al 2 por ciento de las mujeres embarazadas. En la mayoría de los casos, la infección se desarrolla primero en el tracto urinario inferior. Si no se diagnostica y trata adecuadamente, la infección puede extenderse desde la uretra y el área genital a la vejiga y luego a uno o ambos riñones.

Las mujeres embarazadas tienen más probabilidades de desarrollar pielonefritis que las mujeres que no están embarazadas. Esto se debe a cambios fisiológicos durante el embarazo que pueden interferir con el flujo de orina.

Normalmente, los uréteres drenan la orina del riñón hacia la vejiga y fuera del cuerpo a través de la uretra. Durante el embarazo, la alta concentración de la hormona progesterona puede inhibir la contracción de estos conductos de drenaje. Además, a medida que el útero se agranda durante el embarazo, puede comprimir los uréteres.

Estos cambios pueden conducir a problemas con el drenaje adecuado de orina de los riñones, haciendo que la orina permanezca estancada. Como resultado, las bacterias en la vejiga pueden migrar a los riñones en lugar de ser expulsadas del sistema. Esto causa una infección. La bacteria Escherichia coli (E. coli) es la causa habitual. Otras bacterias, como Klebsiella pneumoniae, la especie Proteus y Staphylococcus, también pueden causar infecciones renales.

¿Cuáles son los síntomas de la pielonefritis?

Por lo general, los primeros síntomas de pielonefritis son fiebre alta, escalofríos y dolor en ambos lados de la espalda baja.

En algunos casos, esta infección causa náuseas y vómitos. Los síntomas urinarios también son comunes, que incluyen:

  • frecuencia urinaria, o la necesidad de orinar con frecuencia
  • urgencia urinaria, o la necesidad de orinar inmediatamente
  • disuria o dolor al orinar
  • hematuria o sangre en la orina

¿Cuáles son las complicaciones de la pielonefritis?

El tratamiento adecuado de la pielonefritis puede prevenir problemas graves. Si no se trata, puede provocar una infección bacteriana en el torrente sanguíneo llamada sepsis. Esto puede extenderse a otras partes del cuerpo y causar afecciones graves que requieren tratamiento de emergencia.

La pielonefritis no tratada también puede provocar dificultad respiratoria aguda a medida que se acumula líquido en los pulmones.

La pielonefritis durante el embarazo es una causa principal de parto prematuro, lo que pone al bebé en alto riesgo de complicaciones graves e incluso la muerte.

¿Cómo se diagnostica la pielonefritis?

Una prueba de orina puede ayudar a su médico a determinar si sus síntomas son el resultado de una infección renal. La presencia de glóbulos blancos y bacterias en la orina, que se pueden ver con un microscopio, son signos de infección. Su médico puede hacer un diagnóstico definitivo tomando cultivos bacterianos de su orina.

¿Cómo se debe tratar la pielonefritis?

Como regla general, si desarrolla pielonefritis durante el embarazo, será hospitalizada para recibir tratamiento. Se le administrarán antibióticos por vía intravenosa, probablemente medicamentos de cefalosporina como cefazolina (Ancef) o ceftriaxona (Rocephin).

Si sus síntomas no mejoran, es posible que las bacterias que causan la infección sean resistentes al antibiótico que está tomando. Si su médico sospecha que el antibiótico no puede matar la bacteria, puede agregar un antibiótico muy fuerte llamado gentamicina (Garamycin) a su tratamiento.

El bloqueo dentro del tracto urinario es la otra causa principal del fracaso del tratamiento. Por lo general, es causada por un cálculo renal o una compresión física del uréter por el útero en crecimiento durante el embarazo. La obstrucción del tracto urinario se diagnostica mejor mediante una radiografía o una ecografía de los riñones.

Una vez que su condición comience a mejorar, es posible que se le permita salir del hospital. Se le administrarán antibióticos orales durante 7 a 10 días. Su médico elegirá su medicamento en función de su efectividad, toxicidad y costo. A menudo se recetan medicamentos como trimetoprima-sulfametoxazol (Septra, Bactrim) o nitrofurantoína (Macrobid).

Las infecciones recurrentes más adelante en el embarazo no son infrecuentes. La forma más rentable de reducir el riesgo de recurrencia es tomar una dosis diaria de un antibiótico, como sulfisoxazol (Gantrisin) o macrocristales de monohidrato de nitrofurantoína (Macrobid), como medida preventiva. Recuerde que las dosis de drogas pueden variar. Su médico le recetará lo que es adecuado para usted.

Si está tomando medicamentos preventivos, también debe analizar su orina para detectar bacterias cada vez que visite a su médico. Además, asegúrese de informar a su médico si reaparece algún síntoma. Si los síntomas regresan o si una prueba de orina muestra la presencia de bacterias o glóbulos blancos, su médico puede recomendar otro cultivo de orina para determinar si es necesario el tratamiento.

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