¿Qué es la esclerosis múltiple?
La esclerosis múltiple (EM) es una afección en la que el sistema inmunitario del cuerpo ataca el tejido sano del sistema nervioso central (SNC). Las áreas afectadas incluyen:
- cerebro
- médula espinal
- nervios ópticos
Existen varios tipos de esclerosis múltiple, pero los médicos actualmente no tienen una prueba definitiva para determinar si alguien tiene la afección.
Debido a que no hay una sola prueba de diagnóstico para la EM, su médico puede realizar varias pruebas para descartar otras posibles afecciones. Si las pruebas son negativas, pueden sugerir otras pruebas para determinar si sus síntomas se deben a la EM.
Sin embargo, las innovaciones en imágenes y la investigación continua sobre la EM en general han significado mejoras en el diagnóstico y el tratamiento de la EM.
¿Cuáles son los síntomas de la EM?
El SNC actúa como el centro de comunicación en su cuerpo. Envía señales a los músculos para que se muevan, y el cuerpo transmite señales para que el SNC las interprete. Estas señales pueden incluir mensajes sobre lo que está viendo o sintiendo, como tocar una superficie caliente.
En el exterior de las fibras nerviosas que llevan señales hay una carcasa protectora llamada mielina (MY-uh-lin). La mielina facilita que las fibras nerviosas transmitan mensajes. Es similar a cómo un cable de fibra óptica puede conducir mensajes más rápido que el cable tradicional.
Cuando tiene EM, su cuerpo ataca la mielina y las células que la producen. En algunos casos, su cuerpo incluso ataca las células nerviosas.
Los síntomas de la EM varían de persona a persona. A veces, los síntomas van y vienen.
Los médicos asocian algunos síntomas como más comunes en personas que viven con EM. Éstos incluyen:
- disfunción vesical e intestinal
- depresión
- dificultad para pensar, como memoria afectada y problemas para concentrarse
- dificultad para caminar, como perder el equilibrio
- mareo
- fatiga
- entumecimiento u hormigueo en la cara o el cuerpo
- dolor
- espasticidad muscular
- problemas de visión, incluyendo visión borrosa y dolor al mover los ojos
- debilidad, especialmente debilidad muscular
Los síntomas menos comunes de la EM incluyen:
- problemas respiratorios
- dolor de cabeza
- pérdida de la audición
- picor
- problemas para tragar
- convulsiones
- dificultades para hablar, como dificultad para hablar
- temblores
Si tiene alguno de estos síntomas, hable con su médico.
¿Cuál es el proceso para diagnosticar la EM?
La EM no es la única condición que resulta de la mielina dañada. Hay otras condiciones médicas que su médico puede considerar al diagnosticar la EM que podrían incluir:
- trastornos autoinmunes, como la enfermedad vascular del colágeno
- exposición a productos químicos tóxicos
- Síndorme de Guillain-Barré
- trastornos hereditarios
- infección viral
- deficiencia de vitamina B-12
Su médico comenzará solicitando su historial médico y revisando sus síntomas. También realizarán pruebas que pueden ayudarlos a evaluar su función neurológica. Su evaluación neurológica incluirá:
- probando tu saldo
- verte caminar
- evaluando tus reflejos
- probando tu visión
Análisis de sangre
Su médico también puede ordenar análisis de sangre. Esto es para descartar otras afecciones médicas y deficiencias vitamínicas que podrían estar causando sus síntomas.
Pruebas potenciales evocadas
Las pruebas de potencial evocado (EP) son aquellas que miden la actividad eléctrica del cerebro. Si la prueba muestra signos de actividad cerebral lenta, esto podría indicar EM.
La prueba de EP implica colocar cables en el cuero cabelludo sobre áreas específicas de su cerebro. Luego estará expuesto a la luz, los sonidos u otras sensaciones mientras un examinador mide sus ondas cerebrales. Esta prueba es indolora.
Si bien hay varias medidas de EP diferentes, la versión más aceptada es el EP visual. Esto implica pedirle que vea una pantalla que muestra un patrón de tablero de ajedrez alternativo, mientras el médico mide la respuesta de su cerebro.
Resonancia magnética (MRI)
La resonancia magnética (IRM) puede mostrar lesiones anormales en el cerebro o la médula espinal que son características de un diagnóstico de EM. En las imágenes de resonancia magnética, estas lesiones aparecerán de color blanco brillante o muy oscuro.
Debido a que puede tener lesiones en el cerebro por otras razones, como después de sufrir un derrame cerebral, su médico debe descartar estas causas antes de hacer un diagnóstico de EM.
Una resonancia magnética no implica exposición a la radiación y no es dolorosa. La exploración utiliza un campo magnético para medir la cantidad de agua en el tejido. Por lo general, la mielina repele el agua. Si una persona con EM ha dañado la mielina, aparecerá más agua en la exploración.
Punción lumbar (punción lumbar)
Este procedimiento no siempre se usa para diagnosticar la EM. Pero es uno de los posibles procedimientos de diagnóstico. Una punción lumbar consiste en insertar una aguja en el canal espinal para eliminar el líquido.
Un profesional de laboratorio analiza el líquido cefalorraquídeo para detectar la presencia de ciertos anticuerpos que las personas con EM tienden a tener. El líquido también puede analizarse para detectar infecciones, lo que podría ayudar a su médico a descartar la EM.
Criterios de diagnóstico
Es posible que los médicos tengan que repetir las pruebas de diagnóstico para la EM varias veces antes de poder confirmar el diagnóstico. Esto se debe a que los síntomas de la EM pueden cambiar. Pueden diagnosticar a alguien con EM si las pruebas apuntan a los siguientes criterios:
- Los signos y síntomas indican que hay daño a la mielina en el SNC.
- El médico ha identificado al menos dos o más lesiones en dos o más partes del SNC mediante una resonancia magnética.
- Hay evidencia basada en un examen físico de que el SNC ha sido afectado.
- Una persona ha tenido dos o más episodios de función neurológica afectada durante al menos un día, y ocurrieron con un mes de diferencia. O bien, los síntomas de una persona han progresado en el transcurso de un año.
- El médico no puede encontrar ninguna otra explicación para los síntomas de la persona.
Los criterios de diagnóstico han cambiado a lo largo de los años y probablemente continuarán cambiando a medida que surjan nuevas tecnologías e investigaciones.
Los criterios aceptados más recientes se publicaron en 2017 como Criterios McDonald revisados. El Panel Internacional sobre el Diagnóstico de la Esclerosis Múltiple publicó estos criterios.
Una de las innovaciones más recientes en el diagnóstico de EM es una herramienta llamada tomografía de coherencia óptica (OCT). Esta herramienta le permite al médico obtener imágenes del nervio óptico de una persona. La prueba es indolora y es muy similar a tomar una fotografía de su ojo.
Los médicos saben que las personas con EM tienden a tener nervios ópticos que se ven diferentes de las personas que no tienen la enfermedad. La OCT también permite que un médico rastree la salud ocular de una persona observando el nervio óptico.
¿El proceso de diagnóstico es diferente para cada tipo de EM?
Los médicos han identificado varios tipos de EM. En 2013, el Comité Asesor Internacional sobre Ensayos Clínicos de EM revisó las descripciones de estos tipos en base a nuevas investigaciones y tecnología de imágenes actualizada.
Aunque el diagnóstico de EM tiene criterios iniciales, determinar el tipo de EM que tiene una persona es una cuestión de rastrear los síntomas de EM de una persona a lo largo del tiempo. Para determinar el tipo de EM que tiene una persona, los médicos buscan
- Actividad de la EM
- remisión
- progresión de la condición
Los tipos de EM incluyen:
EM recurrente-remitente
Se estima que el 85 por ciento de las personas con EM son diagnosticadas inicialmente con EM recurrente-remitente, que se caracteriza por recaídas. Esto significa que aparecen nuevos síntomas de EM y son seguidos por una remisión de los síntomas.
Aproximadamente la mitad de los síntomas que ocurren durante las recaídas dejan algunos problemas persistentes, pero estos pueden ser muy leves. Durante una remisión, la condición de una persona no empeora.
EM progresiva primaria
La sociedad nacional de EM estima que el 15 por ciento de las personas con EM tienen EM progresiva primaria. Las personas con este tipo experimentan un empeoramiento constante de los síntomas, generalmente con menos recaídas y remisiones al comienzo de su diagnóstico.
MS progresiva secundaria
Las personas con este tipo de EM tienen una incidencia temprana de recaída y remisión, y los síntomas empeoran con el tiempo.
Síndrome clínicamente aislado (CIS)
Un médico puede diagnosticar a una persona con síndrome clínicamente aislado (CIS) si tiene un episodio de síntomas neurológicos asociados con la EM que dura al menos 24 horas. Estos síntomas incluyen inflamación y daño a la mielina.
Tener solo un episodio de experimentar un síntoma asociado con la EM no significa que una persona desarrolle EM.
Sin embargo, si los resultados de la resonancia magnética de una persona con CIS muestran que podrían estar en mayor riesgo de desarrollar EM, las nuevas pautas recomiendan comenzar la terapia de modificación de la enfermedad.
Para llevar
Según la National MS Society, estas pautas tienen el potencial de reducir la aparición de EM en personas cuyos síntomas se detectan en las primeras etapas.