¿Qué es la hidrocodona?
La hidrocodona es un analgésico ampliamente recetado. Se vende bajo la marca más conocida Vicodin. Este medicamento combina hidrocodona y acetaminofeno. La hidrocodona puede ser muy efectiva, pero también puede convertirse en hábito.
Si su médico le receta hidrocodona, puede tomar medidas para evitar complicaciones graves por la adicción a la hidrocodona. Sin embargo, primero debe comprender por qué y cómo la hidrocodona se vuelve adictiva y los signos y síntomas de la adicción a la hidrocodona.
Causas de la adicción a la hidrocodona
La hidrocodona es un opioide en una clase de medicamentos conocidos como analgésicos narcóticos. Estas drogas se conectan a proteínas en el cerebro y la médula espinal llamadas receptores opioides.
Los opioides interfieren con las señales de dolor que se dirigen al cerebro para cambiar su percepción del dolor y su reacción emocional. Cuando se usa correctamente y solo por un período corto, la hidrocodona generalmente es segura y efectiva.
Algunas personas que comienzan a tomar hidrocodona como tratamiento para el dolor lo toman para tener una sensación de euforia. Como resultado, lo usan por más tiempo de lo recomendado, o usan más de lo recetado por su médico.
Tomar hidrocodona durante mucho tiempo puede generar tolerancia al medicamento. Esto significa que su cuerpo necesita más medicamento para sentir los mismos efectos.
Síntomas
Los síntomas de la adicción a la hidrocodona pueden variar de persona a persona. Los síntomas comunes pueden incluir:
- latidos cardíacos más lentos
- mareos o aturdimiento
- náuseas y vómitos
- convulsiones
- miedo y depresión
- confusión
- dolores de cabeza
- zumbido en los oídos
- visión borrosa
- respiración lenta
- piel fría y húmeda
- somnolencia
- debilidad muscular
Prevenir la adicción a la hidrocodona
La mejor manera de prevenir la adicción a la hidrocodona es tomar el medicamento exactamente como lo indique su médico. También es importante registrar su dolor en un diario mientras lo toma. Revise su diario de dolor de vez en cuando para ver cómo está progresando.
Si se da cuenta de que su dolor está disminuyendo, informe a su médico, incluso si su receta no se ha agotado. Es posible que su médico quiera reducir su dosis gradualmente y que deje de tomarla antes de lo esperado.
Si siente que está empezando a desear el medicamento incluso en los momentos en que siente poco o nada de dolor, hable con su médico de inmediato. Pueden trabajar con usted para evitar desarrollar una adicción a la hidrocodona.
Tratamiento de la adicción a la hidrocodona
Si se encuentra tomando hidrocodona por más tiempo de lo recetado o tomando dosis más grandes a pesar de las consecuencias negativas, es posible que tenga una adicción. Dígale a su médico de inmediato. Su médico puede hacer que reduzca su uso lentamente en lugar de suspenderlo repentinamente.
Dejar de usarlo repentinamente puede provocar síntomas de abstinencia, como:
- ansiedad
- problemas para dormir
- irritabilidad
- sudoración inusual
- dolores musculares
Si cree que no puede dejar de fumar por su cuenta, hay muchos programas disponibles para ayudarlo. Algunos de estos programas usan medicamentos para ayudar a aliviar la abstinencia, mientras que otros no. El mejor enfoque para usted dependerá en gran medida de la naturaleza de su adicción.
Una adicción a largo plazo que implica altas dosis de hidrocodona puede implicar un período de recuperación más largo que la adicción por el uso a corto plazo.
Una evaluación de salud mental debe ser parte de su recuperación. Las personas con trastornos por consumo de sustancias deben someterse a pruebas de detección de depresión y otros problemas de salud mental. También considere grupos de apoyo durante y después de la recuperación.
Organizaciones como Narcóticos Anónimos y Alcohólicos Anónimos pueden ayudarlo a evitar recaídas con hidrocodona u otra droga.
Hable con su doctor
La hidrocodona puede ser una forma segura y efectiva de tratar el dolor intenso, pero puede ser adictiva. La adicción puede causar una variedad de problemas. Puede afectar las relaciones, el empleo, su salud y otras partes de su vida.
Si su médico le ha recetado este medicamento y le preocupa la adicción, hable sobre sus preocupaciones. Si tiene antecedentes personales o familiares de trastornos por uso de sustancias, un analgésico alternativo puede ser una mejor opción para usted.
Cuanto más sepa sobre la hidrocodona, mayores serán sus posibilidades de evitar la adicción.