Eczema
Según la Asociación Nacional de Eczema, el eccema es una de las afecciones cutáneas más comunes en los Estados Unidos. Más de 30 millones de personas se han visto afectadas por alguna variación. Hay varios tipos diferentes, que incluyen:
- dermatitis atópica
- dermatitis alérgica
- dermatitis de contacto
- eccema dishidrótico
- dermatitis seborreica
La dermatitis atópica es el tipo más común de eccema. Actualmente no hay cura, pero los síntomas pueden ser manejables si se toman las medidas adecuadas.
Los síntomas de la dermatitis atópica incluyen:
- picor
- piel seca, áspera o escamosa
- piel hinchada, inflamada o roja
- erupción con costras o llanto (supuración)
Aceites vegetales
Según un artículo de 2017 en el International Journal of Molecular Sciences, los aceites vegetales tienen una serie de beneficios y han sido utilizados por médicos, especialmente dermatólogos, durante muchos años.
Cuando se aplican a la piel, los aceites vegetales ayudan a retener la humedad al actuar como una capa de protección que evita que el agua y otros aceites escapen de su cuerpo.
Este artículo de la revista también indica que varios tipos de aceites pueden proporcionar este tipo de protección. Sin embargo, muchos de ellos solo permanecen en la superficie de la piel y no proporcionan una penetración profunda a las otras capas superiores. Estos aceites incluyen:
- aceite de jojoba
- aceite de soja
- aceite de aguacate
- aceite de almendras
Aceite esencial o aceite fijo
Los aceites vegetales se pueden clasificar como aceites esenciales o aceites fijos. Los aceites esenciales son mucho más potentes y pueden irritar severamente su piel si no se diluyen o se usan correctamente.
En la mayoría de los casos, los aceites fijos se pueden usar sin diluirlos. Están compuestos por una serie de ácidos grasos, ceras, fosfolípidos y más, que pueden afectar diferentes aspectos de su piel de varias maneras.
¿Qué es el aceite de rosa mosqueta?
El aceite de rosa mosqueta, también conocido como aceite de semilla de rosa mosqueta, es un tipo de aceite fijo. Se toma de las semillas de la planta de rosa de perro (Rosa canina L.). Según el International Journal of Molecular Sciences, existen múltiples formas de extraer este aceite, pero la técnica preferida es el prensado en frío. El prensado en frío no implica calor u otros productos químicos que podrían cambiar la composición química del aceite.
El aceite de rosa mosqueta contiene una gran cantidad de antioxidantes y ácidos grasos insaturados. Estos ingredientes ayudan a que sea un tratamiento tópico efectivo para afecciones de la piel como el eccema. Los estudios han demostrado que el aceite de rosa mosqueta tiene cualidades antiinflamatorias y antioxidantes, que ofrecen beneficios como una piel más suave y elástica.
Como tratar el eccema con aceite de rosa mosqueta
El tratamiento de la dermatitis atópica con aceite de rosa mosqueta es sencillo. Use el aceite de rosa mosqueta como lo haría con un humectante regular. Un método recomendado es bañarse o ducharse brevemente en agua tibia dos veces al día. Después de secarte suavemente, aplica el aceite en el área afectada.
¿Es el aceite de rosa mosqueta lo mismo que el aceite de rosa?
El aceite de rosa mosqueta es muy diferente del aceite de rosa. El aceite de rosa es un aceite esencial, que requiere dilución. El aceite de rosa mosqueta es un aceite fijo, lo que significa que no requiere dilución.
Riesgos
Los aceites vegetales pueden tener una variedad de efectos en su piel según la composición del aceite y su piel. Aunque el aceite de rosa mosqueta generalmente se considera seguro para el uso tópico, las personas con alergias muy sensibles a la piel o las plantas pueden correr el riesgo de una mayor irritación o una reacción alérgica.
Para llevar
Antes de tratar su eccema con aceite de semilla de rosa mosqueta, comprenda sus desencadenantes de eccema. Aprender qué irrita la piel y causa una reacción es crucial para controlar el eccema. Este conocimiento puede ayudarlo a determinar qué medicamentos u opciones de tratamiento alternativas son mejores para usted.
Hable con su médico o dermatólogo antes de comenzar cualquier tratamiento en el hogar para que puedan brindarle orientación específica para usted y sus condiciones de salud actuales.