Prueba esta comida poderosa
La Clínica Cleveland pone el ajo en su lista de 36 alimentos energéticos, y por una buena razón. El ajo es una rica fuente de fitoquímicos. Se cree que estos químicos de plantas evitan enfermedades y ayudan a estimular su sistema inmunológico.
Los llamados "alimentos energéticos" proporcionan una gran cantidad de nutrientes pero pocas calorías. Eso se traduce en muchos beneficios potenciales para su cuerpo y su salud en general. Comer alimentos ricos en nutrientes como parte de su dieta regular puede ayudar a reducir el riesgo de muchas afecciones de salud, incluidas enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer.
¿El ajo previene la enfermedad?
Según el Centro Nacional de Salud Complementaria e Integrativa (NCCIH), el ajo se ha utilizado tradicionalmente para tratar muchas afecciones de salud, que incluyen:
- hipertensión
- colesterol alto
- cardiopatía
- diferentes tipos de cáncer
Algunos de estos usos populares para el ajo han sido respaldados por estudios científicos modernos, mientras que el jurado aún está fuera de otros.
¿El ajo es bueno para la presión arterial?
La investigación sugiere que el ajo puede ayudar a bajar la presión arterial, informa el NCCIH. Tomar suplementos de ajo puede ser especialmente útil si tiene presión arterial alta o hipertensión crónica.
El ajo crudo y los suplementos de ajo contienen el compuesto alicina. Este compuesto puede ayudar a relajar los músculos lisos en los vasos sanguíneos. Cuando esos músculos se relajan, sus vasos sanguíneos se dilatan y la presión arterial baja.
¿Qué hay de tu colesterol?
Además de posiblemente reducir la presión arterial, el NCCIH informa que el ajo puede retrasar el desarrollo de la aterosclerosis. Esta es una condición en la cual las placas que contienen colesterol se acumulan en sus arterias. Se endurecen y se estrechan, lo que aumenta su riesgo de ataque cardíaco.
Los investigadores también han examinado el efecto del ajo sobre los niveles de colesterol en la sangre. Los resultados han sido mixtos. Alguna evidencia sugiere que el uso de ajo a corto plazo puede ayudar a reducir sus niveles de colesterol. Pero un estudio financiado por el NCCIH sobre ajo fresco, tabletas de ajo seco y tablas de extracto de ajo envejecido no encontró ningún efecto para reducir el colesterol en la sangre.
Puede que no cure el cáncer, pero …
Algunas investigaciones sugieren que comer ajo puede ayudar a prevenir ciertos tipos de cáncer, informa el Instituto Nacional del Cáncer. Por ejemplo, los estudios han encontrado un vínculo entre una dieta rica en ajo y un menor riesgo de cáncer de estómago, colon, esófago, páncreas y seno.
Si bien esta investigación es prometedora, ningún ensayo clínico ha explorado las ventajas potenciales para combatir el cáncer de una dieta rica en ajo, advierte el NCCIH. Un ensayo clínico con suplementos de ajo descubrió que no tenían ningún efecto en la prevención del cáncer de estómago.
¿Puede curar el resfriado común?
Cuando se trata de matar el virus del resfriado común, el ajo tiene una buena reputación. Pero una revisión publicada en la Base de Datos Cochrane de Revisiones Sistemáticas encontró que se necesita más investigación. Un ensayo encontró que las personas que tomaron suplementos de ajo informaron haber pasado menos días enfermos con el resfriado común.
El ajo es maloliente pero seguro
Fuera del mal aliento o la flatulencia, los riesgos de comer ajo o tomar suplementos de ajo son bajos. Según el NCCIH, el ajo puede causar olor corporal, acidez estomacal o malestar estomacal en algunas personas. Puede diluir su sangre, lo que puede ser riesgoso si tiene un trastorno hemorrágico o una cirugía próxima. También puede interferir con saquinavir, un medicamento utilizado para tratar el VIH. Pídale a su médico más información sobre los riesgos potenciales y los efectos secundarios de tomar ajo para su salud.
Aunque el fuerte sabor a ajo puede ser maravilloso en la comida, es posible que no te encanten sus efectos en tu aliento. Para evitar el mal aliento del ajo, cómelo con una manzana o una mezcla de vinagre de manzana y agua con miel. Una rodaja de limón también puede hacer el truco.
Come ajo regularmente
Para agregar más ajo a su dieta, pruebe esta sencilla receta. Agregue cuatro dientes de ajo a su exprimidor, junto con dos tomates y un limón. Si no tiene un exprimidor, jugo de limón manualmente. Luego mezcle el jugo de limón, los tomates y el ajo en una licuadora hasta que quede suave.
Mantenga este delicioso jugo o licuado refrigerado. Bebe diariamente, especialmente cuando estás luchando contra una infección. También puede agregar más ajo a su dieta poniéndolo en vinagretas, hummus, salsas y papas fritas.
El poder del clavo
Aunque se necesita más investigación, la ciencia moderna sugiere que el ajo puede tener beneficios para la salud. Esta investigación se basa en siglos de medicina tradicional y remedios caseros que han aprovechado los poderes de promoción de la salud del ajo.
El ajo puede no ser una panacea, pero es una adición rica en nutrientes a cualquier dieta. Agregarlo a su menú diario es una forma deliciosa de disfrutar de los muchos nutrientes y fitoquímicos que ofrece. También puede hablar con su médico para obtener más información sobre los posibles beneficios y riesgos de tomar suplementos de ajo.