¿Qué es un aneurisma de bayas?
Un aneurisma es un agrandamiento de una arteria causado por debilidad en la pared de la arteria. Un aneurisma de bayas, que se parece a una baya en un tallo estrecho, es el tipo más común de aneurisma cerebral. Representan el 90 por ciento de todos los aneurismas cerebrales, según Stanford Health Care. Los aneurismas de las bayas tienden a aparecer en la base del cerebro donde se encuentran los principales vasos sanguíneos, también conocido como el Círculo de Willis.
Con el tiempo, la presión del aneurisma sobre la pared de la arteria ya débil puede hacer que el aneurisma se rompa. Cuando se rompe un aneurisma de bayas, la sangre de la arteria se traslada al cerebro. Un aneurisma roto es una afección grave que necesita tratamiento médico inmediato.
Tenga en cuenta que, según la American Stroke Association, solo del 1.5 al 5 por ciento de las personas desarrollarán un aneurisma cerebral. Entre las personas que tienen un aneurisma cerebral, solo del 0,5 al 3 por ciento experimentarán una ruptura.
¿Tengo un aneurisma de bayas?
Los aneurismas de las bayas suelen ser pequeños y sin síntomas, pero los más grandes a veces ejercen presión sobre el cerebro o sus nervios. Esto puede causar síntomas neurológicos, que incluyen:
- dolor de cabeza en un área particular
- pupilas grandes
- visión borrosa o doble
- dolor arriba o detrás del ojo
- debilidad y entumecimiento
- dificultad para hablar
Póngase en contacto con su médico si experimenta alguno de estos síntomas.
Los aneurismas rotos generalmente hacen que la sangre de la arteria afectada se mueva hacia el cerebro. Esto se llama hemorragia subaracnoidea. Los síntomas de una hemorragia subaracnoidea incluyen los enumerados anteriormente, así como:
- un dolor de cabeza muy fuerte que aparece rápidamente
- inconsciencia
- náuseas y vómitos
- rigidez de nuca
- cambio repentino en el estado mental
- sensibilidad a la luz, también llamada fotofobia
- convulsiones
- un párpado caído
¿Qué causa los aneurismas de bayas?
Hay ciertos factores que hacen que algunas personas sean más propensas a tener un aneurisma de bayas. Algunos son congénitos, lo que significa que las personas nacen con ellos. Otros son condiciones médicas y hábitos de estilo de vida. En general, los aneurismas de bayas son más comunes en adultos mayores de 40 años y mujeres.
Factores de riesgo congénito
- trastornos del tejido conectivo (p. ej., síndrome de Ehlers-Danlos, síndrome de Marfan y displasia fibromuscular)
- poliquistosis renal
- una pared arterial anormal
- malformación arteriovenosa cerebral
- antecedentes familiares de aneurismas de bayas
- infecciones de la sangre
- tumores
- traumatismo craneoencefálico
- hipertensión
- arterias endurecidas, también llamadas aterosclerosis
- niveles más bajos de estrógeno
- de fumar
- uso de drogas, especialmente cocaína
- uso excesivo de alcohol
Factores de riesgo medico
Factores de riesgo de estilo de vida
¿Cómo sé si tengo un aneurisma de bayas?
Su médico puede diagnosticar un aneurisma de bayas realizando varias pruebas. Estos incluyen tomografía computarizada (CT) y exploraciones de resonancia magnética (MRI). Mientras realiza cualquiera de estas exploraciones, su médico también puede inyectarle un tinte para ver mejor el flujo sanguíneo en su cerebro.
Si esos métodos no muestran nada, pero su médico cree que aún puede tener un aneurisma de bayas, hay otras pruebas de diagnóstico que pueden realizar.
Una de esas opciones es un angiograma cerebral. Esto se realiza insertando un tubo delgado que contiene colorante en una arteria grande, generalmente la ingle, y empujándolo hacia las arterias del cerebro. Esto permite que sus arterias se muestren fácilmente en una radiografía. Sin embargo, esta técnica de imagen rara vez se usa hoy en día dada su naturaleza invasiva.
¿Cómo se tratan los aneurismas de bayas?
Hay tres opciones de tratamiento quirúrgico para los aneurismas de bayas sin romper y rotos. Cada opción viene con su propio conjunto de riesgos de posibles complicaciones. Su médico considerará el tamaño y la ubicación del aneurisma, así como su edad, otras afecciones médicas y antecedentes familiares para elegir la opción más segura para usted.
Recorte quirúrgico
Uno de los tratamientos más comunes para el aneurisma de bayas es el recorte quirúrgico. Un neurocirujano extrae una pequeña parte del cráneo para acceder al aneurisma. Colocan un clip de metal en el aneurisma para evitar que la sangre fluya hacia él.
El recorte quirúrgico es una cirugía invasiva que generalmente requiere algunas noches en el hospital. Después de eso, puede esperar de cuatro a seis semanas de recuperación. Durante ese tiempo, deberías poder cuidarte a ti mismo. Solo asegúrese de limitar su actividad física para permitir que su cuerpo se recupere. Puede comenzar lentamente agregando actividad física suave, como caminar y tareas domésticas. Después de cuatro a seis semanas, debería poder volver a sus niveles de actividad previos a la cirugía.
Enrollamiento endovascular
La segunda opción de tratamiento es el enrollamiento endovascular, que es menos invasivo que el recorte quirúrgico. Se inserta un tubo pequeño en una arteria grande y se empuja hacia arriba dentro del aneurisma. Este proceso es similar al del angiograma cerebral que su médico puede usar para obtener un diagnóstico. Un alambre de platino suave atraviesa el tubo y llega al aneurisma. Una vez que está en el aneurisma, el alambre se enrolla y hace que la sangre se coagule, lo que sella el aneurisma.
El procedimiento generalmente solo requiere una estadía en el hospital de una noche, y puede volver a su nivel habitual de actividad en unos días. Si bien esta opción es menos invasiva, conlleva el riesgo de hemorragias futuras, que pueden requerir cirugía adicional.
Desviadores de flujo
Los desviadores de flujo son una opción de tratamiento relativamente nueva para los aneurismas de bayas. Implican un pequeño tubo, llamado stent, que se coloca en el vaso sanguíneo principal del aneurisma. Redirige la sangre lejos del aneurisma. Esto reduce inmediatamente el flujo sanguíneo al aneurisma, que debería cerrarse por completo en seis semanas a seis meses. En pacientes que no son candidatos quirúrgicos, un desviador de flujo puede ser una opción de tratamiento más segura, ya que no requiere ingresar al aneurisma, lo que aumenta el riesgo de ruptura del aneurisma.
Manejo de síntomas
Si el aneurisma no se ha roto, su médico puede decidir que es más seguro monitorear el aneurisma con exámenes regulares y controlar cualquier síntoma que tenga. Las opciones para controlar los síntomas incluyen:
- analgésicos para dolores de cabeza
- bloqueadores de los canales de calcio para evitar que los vasos sanguíneos se estrechen
- medicamentos anticonvulsivos para las convulsiones causadas por la ruptura de aneurismas
- angioplastia o una inyección de un medicamento que aumenta la presión arterial para mantener el flujo sanguíneo y prevenir un derrame cerebral
- drenaje del exceso de líquido cefalorraquídeo de un aneurisma roto usando un catéter o sistema de derivación
- terapia física, ocupacional y del habla para tratar el daño cerebral causado por un aneurisma de bayas roto
Cómo prevenir los aneurismas de bayas
No se conoce una forma de prevenir los aneurismas de las bayas, pero hay cambios en el estilo de vida que pueden reducir su riesgo. Éstos incluyen:
- dejar de fumar y evitar el humo de segunda mano
- Evitar el consumo de drogas recreativas
- Seguir una dieta saludable baja en grasas saturadas, grasas trans, colesterol, sal y azúcar agregada.
- haciendo tanta actividad física como puedas
- trabajando con su médico para tratar la presión arterial alta o el colesterol alto si los tiene
- Hable con su médico sobre los riesgos asociados con los anticonceptivos orales.
Si ya tiene un aneurisma de bayas, hacer estos cambios aún puede ayudarlo a evitar que el aneurisma se rompa. Además de estos cambios, también debe evitar esfuerzos innecesarios, como levantar pesas pesadas, si tiene un aneurisma no roto.
¿Los aneurismas de las bayas son siempre fatales?
Muchas personas con aneurismas de bayas pasan toda su vida sin saber que tienen uno. Sin embargo, cuando un aneurisma de bayas se vuelve muy grande o se rompe, puede tener efectos graves de por vida. Estos efectos duraderos dependen principalmente de su edad y condición, así como del tamaño y la ubicación del aneurisma de bayas.
La cantidad de tiempo entre la detección y el tratamiento es muy importante. Escuche a su cuerpo y busque atención médica inmediata si cree que podría tener un aneurisma de bayas.