¿Qué es una prueba de fragilidad osmótica?
Se puede usar una prueba de fragilidad osmótica para ayudar a diagnosticar dos afecciones hereditarias: talasemia y esferocitosis hereditaria:
- La talasemia hace que su cuerpo produzca una forma anormal de hemoglobina. La hemoglobina es la proteína que permite que los glóbulos rojos transporten oxígeno. Si tiene talasemia, es más probable que sus glóbulos rojos sean destruidos. Esto puede provocar anemia.
- La esferocitosis hereditaria causa problemas con la capa externa de los glóbulos rojos y distorsiona su forma. Esto conduce a glóbulos rojos más frágiles y destrucción temprana, que también puede causar anemia.
Para una prueba de fragilidad osmótica, deberá dar una muestra de sangre. Se analizarán sus glóbulos rojos para ver qué tan fácilmente se separan en una solución salina. Si sus glóbulos rojos son más frágiles de lo normal, la prueba se considera positiva.
¿Por qué los médicos ordenan pruebas de fragilidad osmótica?
Los médicos pueden ordenar pruebas de fragilidad osmótica para bebés con antecedentes familiares de talasemia o esferocitosis hereditaria. Esta puede ser una forma rápida y rentable de ayudar a diagnosticar la enfermedad.
Sin embargo, a veces la condición debe confirmarse con otros análisis de sangre o pruebas genéticas. Esto se debe a que ciertas otras condiciones también pueden dar resultados similares.
La prueba de fragilidad osmótica también se puede usar para ayudar a confirmar si la talasemia o la esferocitosis es la causa de la anemia. Los síntomas de anemia pueden incluir:
- fatiga
- dificultad para respirar
- mareo
- palpitaciones
- disminución de la capacidad para hacer ejercicio
¿Cómo se realiza el examen?
No se requieren preparaciones especiales para la prueba. Es un análisis de sangre simple, también conocido como venopunción. Se puede realizar en un laboratorio o en el consultorio de un médico.
Si usa una camisa de manga larga, el técnico le pedirá que se enrolle una de las mangas o que se quite el brazo de la manga.
El técnico atará una correa elástica firmemente alrededor de la parte superior del brazo para ayudar a que la sangre se acumule en las venas. Puede encontrar esta parte del proceso incómoda.
El técnico encontrará una vena y limpiará el área con un antiséptico. Insertarán una aguja hueca en la vena. Para la mayoría de las personas, esta sensación se siente como un pellizco agudo.
Después de recolectar suficiente sangre, el técnico extraerá la aguja. Deberá mantener la presión sobre la punción durante unos segundos. Luego, el técnico cubrirá el lugar con una venda.
Riesgos de la prueba
La extracción de sangre conlleva pocos riesgos. El mayor riesgo, que ocurre extremadamente raramente, es la infección.
Dígale a su médico si comienza a correr una temperatura superior a 100 ° F. También debe buscar ayuda si la piel alrededor de la punción se vuelve roja, hinchada o dolorosa al tocarla.
Durante unos días después de la prueba, la piel alrededor de la punción puede presentar hematomas o sensibilidad. Esto es normal. Aplicar una compresa fría en el área puede reducir los moretones y aliviar las molestias. A menos que su médico le indique lo contrario, puede reanudar todas las actividades normales después de la prueba.
Entendiendo tus resultados
El laboratorio preparará tu sangre. Para evaluar la fragilidad osmótica, sus glóbulos rojos se agregarán a soluciones con diferentes concentraciones de sal. Las células sanguíneas normales son más capaces de permanecer intactas en soluciones bajas en sal que las células sanguíneas más frágiles de esferocitosis o talasemia.
Si sus células son diagnosticadas como frágiles, lo más probable es que tenga esferocitosis hereditaria o talasemia. Ambas condiciones genéticas pueden causar anemia hemolítica. Esta es una forma de anemia que ocurre porque sus glóbulos rojos se destruyen demasiado rápido.
Si su prueba de fragilidad osmótica es positiva, el siguiente paso es confirmar los resultados y evaluar si está anémico activamente.
La persectiva
No todas las personas con estas enfermedades tendrán el mismo nivel de síntomas. Algunas personas solo tendrán formas leves con síntomas ocasionales. Otros tendrán formas graves que requieren tratamiento inmediato y pueden afectar la vida útil.
Una vez que su médico determine el nivel de su afección, analizará sus necesidades de tratamiento. Si su enfermedad es leve y tiene pocos síntomas, la espera vigilante puede ser todo lo que se necesita. El tratamiento para la enfermedad grave dependerá de su diagnóstico específico.