¿Qué es la tripofobia?
La tripofobia es el miedo o el asco de los agujeros muy apretados. Las personas que lo tienen se sienten mareadas cuando miran superficies que tienen pequeños agujeros reunidos entre sí. Por ejemplo, la cabeza de una vaina de semillas de loto o el cuerpo de una fresa podrían provocar molestias en alguien con esta fobia.
La fobia no se reconoce oficialmente. Los estudios sobre la tripofobia son limitados, y la investigación disponible está dividida sobre si debe considerarse o no una condición oficial.
Disparadores
No se sabe mucho acerca de la tripofobia. Pero los desencadenantes comunes incluyen cosas como:
- vainas de semillas de loto
- panales
- fresas
- coral
- espuma de aluminio y metal
- granadas
- burbujas
- condensación
- Cantalupo
- un cúmulo de ojos
Los animales, incluidos los insectos, anfibios, mamíferos y otras criaturas que han manchado la piel o el pelaje, también pueden desencadenar síntomas de tripofobia.
Imágenes de disparadores de tripofobia
Síntomas
Según los informes, los síntomas se desencadenan cuando una persona ve un objeto con pequeños grupos de agujeros o formas que se parecen a los agujeros.
Al ver un grupo de agujeros, las personas con tripofobia reaccionan con asco o miedo. Algunos de los síntomas incluyen:
- la piel de gallina
- sentirse rechazado
- sentirse incómodo
- molestias visuales como fatiga visual, distorsiones o ilusiones
- angustia
- sintiendo que tu piel se eriza
- ataques de pánico
- transpiración
- náusea
- batidos corporales
¿Qué dice la investigación?
Los investigadores no están de acuerdo sobre si clasificar o no la tripofobia como una fobia real. Uno de los primeros estudios sobre tripofobia, publicado en 2013, sugirió que la fobia puede ser una extensión del miedo biológico a las cosas dañinas. Los investigadores encontraron que los síntomas fueron provocados por colores de alto contraste en una determinada disposición gráfica. Argumentan que las personas afectadas por la tripofobia asociaban inconscientemente artículos inofensivos, como las vainas de semillas de loto, con animales peligrosos, como el pulpo de anillos azules.
Un estudio publicado en abril de 2017 cuestiona estos hallazgos. Los investigadores encuestaron a niños en edad preescolar para confirmar si el miedo al ver una imagen con pequeños agujeros se basa en el miedo a los animales peligrosos o en una respuesta a los rasgos visuales. Sus resultados sugieren que las personas que experimentan tripofobia no tienen miedo no consciente de las criaturas venenosas. En cambio, el miedo se desencadena por la apariencia de la criatura.
El "Manual de diagnóstico y estadística" de la Asociación Americana de Psiquiatría (DSM-5) no reconoce la tripofobia como una fobia oficial. Se necesita más investigación para comprender el alcance completo de la tripofobia y las causas de la afección.
Factores de riesgo
No se sabe mucho sobre los factores de riesgo relacionados con la tripofobia. Un estudio de 2017 encontró un posible vínculo entre la tripofobia y el trastorno depresivo mayor y el trastorno de ansiedad generalizada (TAG). Según los investigadores, las personas con tripofobia tenían más probabilidades de experimentar también un trastorno depresivo mayor o TAG. Otro estudio publicado en 2016 también señaló un vínculo entre la ansiedad social y la tripofobia.
Diagnóstico
Para diagnosticar una fobia, su médico le hará una serie de preguntas sobre sus síntomas. También tomarán su historial médico, psiquiátrico y social. También pueden consultar el DSM-5 para ayudar en su diagnóstico. La tripofobia no es una condición diagnosticable porque la fobia no está oficialmente reconocida por las asociaciones médicas y de salud mental.
Tratamiento
Hay diferentes maneras en que se puede tratar una fobia. La forma más efectiva de tratamiento es la terapia de exposición. La terapia de exposición es un tipo de psicoterapia que se enfoca en cambiar su respuesta al objeto o situación que le causa miedo.
Otro tratamiento común para una fobia es la terapia cognitiva conductual (TCC). La TCC combina la terapia de exposición con otras técnicas para ayudarlo a controlar su ansiedad y evitar que sus pensamientos se vuelvan abrumadores.
Otras opciones de tratamiento que pueden ayudarlo a controlar su fobia incluyen:
- terapia de conversación general con un consejero o psiquiatra
- medicamentos como betabloqueantes y sedantes para ayudar a reducir la ansiedad y los síntomas de pánico
- técnicas de relajación, como respiración profunda y yoga
- actividad física y ejercicio para controlar la ansiedad
- respiración consciente, observación, escucha y otras estrategias conscientes para ayudar a lidiar con el estrés
Si bien los medicamentos se han probado con otros tipos de trastornos de ansiedad, se sabe poco sobre su eficacia en la tripofobia.
También puede ser útil:
- descansar lo suficiente
- comer una dieta sana y equilibrada
- Evite la cafeína y otras sustancias que pueden empeorar la ansiedad.
- comunicarse con amigos, familiares o un grupo de apoyo para conectarse con otras personas que manejan los mismos problemas
- enfrentar situaciones de miedo con la mayor frecuencia posible
panorama
La tripofobia no es una fobia oficialmente reconocida. Algunos investigadores han encontrado evidencia de que existe de alguna forma y tiene síntomas reales que pueden afectar la vida cotidiana de una persona si está expuesta a los desencadenantes.
Hable con su médico o un consejero si cree que puede tener tripofobia. Pueden ayudarlo a encontrar la raíz del miedo y controlar sus síntomas.