¿Qué es la recaída?
Recuperarse de la adicción a las drogas o al alcohol no es un proceso rápido. Lleva tiempo superar una dependencia, lidiar con los síntomas de abstinencia y superar la necesidad de usar.
Recaída significa volver a usar después de haber estado abstinente por algún tiempo. Es una amenaza siempre presente cuando intentas recuperarte. El Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas estima que 40 a 60 por ciento de las personas que alguna vez fueron adictas a las drogas eventualmente recaerán.
Conocer las etapas de la recaída y tener un plan para lidiar con ellas puede ayudarlo a evitar que lo vuelva a usar. Siga estas 10 técnicas para ayudarlo a mantenerse encaminado con su recuperación.
1. Reconocer las etapas de la recaída
La recaída ocurre en tres etapas: emocional, mental y física. El proceso puede comenzar semanas o meses antes de que comience a beber o usar drogas nuevamente.
Corre el riesgo de recaer durante cada una de estas tres fases:
- Recaída emocional. Durante esta fase, no estás pensando en usar, pero tus pensamientos y comportamientos te están preparando para una recaída. Te estás aislando y manteniendo tus emociones reprimidas. Te sientes ansioso y enojado. No estás comiendo o durmiendo bien.
- Recaída mental. En esta fase, estás en guerra contigo mismo. Parte de ti quiere usar, y parte de ti no. Estás pensando en las personas y los lugares asociados con el uso y los buenos momentos que pasaste cuando bebías o usabas drogas. Recuerdas solo lo bueno de aquellos tiempos, no lo malo. Empiezas a negociar contigo mismo y planeas usarlo de nuevo.
- Recaída física. Esta es la fase cuando realmente empiezas a usar de nuevo. Comienza con un lapso, la primera bebida o píldora, y vuelve a su uso regular.
2. Conozca sus desencadenantes
Ciertas personas, lugares y situaciones pueden llevarlo nuevamente a beber o usar drogas nuevamente. Tenga en cuenta sus factores desencadenantes para poder evitarlos.
Estos son algunos de los desencadenantes de recaídas más comunes:
- síntomas de abstinencia
- malas relaciones
- personas que te permiten
- suministros de medicamentos (pipas, etc.) y otras cosas que le recuerdan usar
- lugares donde solía beber o usar drogas
- soledad
- estrés
- autocuidado deficiente como no comer, dormir o manejar bien el estrés
3. Recuerda tus razones para dejar de fumar
Cuando la necesidad de usar golpea, recuérdate a ti mismo por qué comenzaste por el camino de la recuperación en primer lugar. Piense en lo descontrolado o enfermo que se sintió cuando estaba usando. Recuerde las cosas vergonzosas que pudo haber hecho o las personas que pudo haber lastimado.
Concéntrese en cuánto mejor será su vida una vez que deje de usar drogas o alcohol para siempre. Piense en lo que lo impulsa a dejar de fumar, como reconstruir relaciones dañadas, mantener un trabajo o recuperarse.
4. Pide ayuda
No intentes recuperarte solo. Obtener soporte hará que el proceso sea mucho más fácil.
Su médico o un centro de tratamiento de adicciones tiene tratamientos para controlar los síntomas de abstinencia. Un terapeuta o consejero puede enseñarle habilidades de afrontamiento para lidiar con los pensamientos negativos o los antojos que pueden llevarlo a usar nuevamente. Su familia y amigos pueden ofrecerle un oído amable cuando se siente deprimido.
Los grupos de apoyo y los programas de 12 pasos como Alcohólicos Anónimos (AA) y Narcóticos Anónimos (NA) también pueden ser muy útiles para prevenir las recaídas.
5. Cuídate
Las personas usan alcohol y drogas para sentirse bien y relajarse. Busque formas más saludables de recompensarse.
Entrar en una rutina de autocuidado. Trate de dormir por lo menos de siete a nueve horas por noche. Coma una dieta bien balanceada con muchas frutas y verduras frescas, proteínas magras y granos integrales. Y hacer ejercicio todos los días. Seguir estos hábitos saludables lo ayudará a sentirse mejor y más en control de su vida.
Relajarse y tomarse el tiempo para hacer cosas que lo hagan feliz es otra parte importante del cuidado personal. Sigue haciendo las cosas que más amas. Ser amable con usted mismo. Reconozca que la recuperación es un proceso difícil y que está haciendo lo mejor que puede.
6. Manejar los síntomas de abstinencia
Los síntomas de abstinencia como náuseas, temblores y sudoración pueden ser tan difíciles que desea usar drogas nuevamente para detenerlas. Ahí es donde entra su equipo de recuperación. Los medicamentos pueden ayudarlo a controlar los síntomas de abstinencia antes de que provoquen una recaída.
7. Distraete
Es natural que sus pensamientos se desvíen al uso de drogas o alcohol. Guíalo suavemente enfocándote en actividades más saludables.
Salga a correr, pasee a su perro o salga a cenar con amigos. O quédese y vea una de sus películas favoritas.
La mayoría de los antojos duran poco tiempo. Si puede aguantar de 15 a 30 minutos, puede superarlo.
8. Llama a un amigo
Tenga a alguien de guardia para los momentos débiles en los que podría volver a caer en sus viejos hábitos. Un buen amigo puede hablarte y recordarte todas las cosas maravillosas en tu vida que vale la pena proteger al evitar las drogas y el alcohol.
9. Recompénsate
La recuperación no es fácil. Dése crédito por cada pequeña ganancia que logre: una semana de sobriedad, un mes sin drogas, etc. Por cada objetivo que logre, obtenga una recompensa como motivación para seguir avanzando. Por ejemplo, reserve un masaje relajante o cómprese algo que le haya echado el ojo.
10. Sigue un modelo
Si no está seguro de cómo avanzar en el proceso de recuperación, siga uno de los modelos de planes de prevención de recaídas disponibles. El experto en abuso de sustancias y salud mental Terry Gorski tiene un plan de prevención de recaídas de nueve pasos que puede ayudarlo a reconocer y manejar las señales de advertencia de recaídas. El psicólogo clínico y especialista en adicciones G. Alan Marlatt, PhD, desarrolló un enfoque que utiliza opciones mentales, conductuales y de estilo de vida para prevenir la recaída.
Para llevar
La recuperación de la adicción a las drogas y al alcohol puede ser un proceso largo y desafiante. Las probabilidades de recaída son altas.
Es importante estar al tanto de las tres etapas de la recaída: emocional, mental y física. Tenga cuidado con las señales que está a punto de comenzar a usar nuevamente.
Obtenga ayuda profesional y cuídese durante su recuperación. Cuanto más comprometido esté con el proceso, más probabilidades tendrá de tener éxito.