El protector solar puede evitar el bronceado hasta cierto punto. Los dermatólogos recomiendan usar protector solar todos los días, y por una buena razón. Usar un protector solar de base química o física puede ayudar a prevenir que los rayos del sol causen fotoenvejecimiento y cáncer de piel.
Todavía puede ser posible obtener un ligero bronceado, incluso si usa protector solar. Sin embargo, ninguna cantidad de bronceado deliberado se considera seguro.
Cómo funciona el protector solar
El protector solar funciona de dos maneras diferentes. Los protectores solares populares a base de químicos funcionan absorbiendo los rayos ultravioleta (UV) y alterándolos antes de que tengan la posibilidad de causar algún daño. Los ejemplos de protectores solares con base química incluyen oxibenzona y octisalato.
Las versiones basadas en la física, por otro lado, reflejan y dispersan los rayos UV lejos de su piel. Los óxidos de zinc y titanio son dos ejemplos de agentes bloqueantes utilizados en el protector solar físico. Estos ingredientes fueron recientemente designados como GRASE, o generalmente reconocidos como seguros y efectivos por la FDA.
Quizás más importante que elegir entre protectores solares químicos y físicos es buscar uno que sea de amplio espectro o que proteja contra los dos tipos dañinos de rayos UV. Estos se llaman rayos ultravioleta (UVA) y ultravioleta B (UVB).
También debe usar protector solar resistente al agua cuando realice ciertas actividades. Esto ayuda a garantizar que el producto no se caiga de la piel y lo deje expuesto a los rayos UV.
Aún así, es importante recordar que el protector solar actúa como un filtro. No puede evitar la exposición de su piel al sol al 100 por ciento. Por lo tanto, aún puede broncearse en algún nivel.
A corto plazo, su piel responde a la exposición al sol al inflamarse. Como resultado de una quemadura solar, su piel se adapta al broncearse. Cuanto más prolongada sea su exposición, más grave puede ser una quemadura. La piel bronceada también es el resultado de la liberación de melanina en el área afectada.
Los efectos negativos no siempre se pueden ver a simple vista. No podrá ver más efectos a largo plazo de la exposición a los rayos UV, como el cáncer y el fotoenvejecimiento. Usar un protector solar de amplio espectro con el FPS adecuado puede ayudar a minimizar este tipo de daño.
De hecho, según la Skin Cancer Foundation, usar protector solar con FPS 15 puede reducir su riesgo de cáncer de piel de melanoma hasta en un 50 por ciento, así como los no melanomas en un 40 por ciento.
Importancia del protector solar
Un protector solar de amplio espectro significa que el producto protege contra los rayos UVA y UVB. Los rayos UVB consisten en longitudes de onda más cortas que pueden causar quemaduras, arrugas y manchas de la edad. Los rayos UVA son más largos y pueden provocar quemaduras y cánceres de piel.
El uso de protector solar no solo protege contra la exposición directa a los rayos UV durante actividades al aire libre, sino que también protege su piel de la exposición diaria. Esto incluye conducir, caminar a su lugar de trabajo o clase, y llevar a sus hijos al parque.
Si se deja sin protección, incluso cantidades aparentemente pequeñas de exposición al sol pueden acumularse con el tiempo. Como mínimo, debe usar una crema hidratante con protección solar en la cara, el cuello y el pecho todos los días.
SPF ideal
Cada protector solar contiene un factor de protección solar o factor de protección solar. El FPS ideal en un protector solar depende de su nivel de exposición al sol. Los protectores solares diarios pueden contener un SPF más bajo, pero la exposición directa al sol requiere un SPF más alto.
Primero es importante entender lo que significan los números SPF. Se refieren al tiempo que le tomaría a su piel quemarse sin usar protector solar, en lugar de ofrecer un nivel específico de protección.
Entonces, por ejemplo, un SPF de 30 significa que su piel podría tardar 30 veces más en quemarse que si se dejara sin protección. Sin embargo, esto solo es cierto si lo aplica correctamente en la cantidad correcta.
Un SPF también significa que todavía se permite que un cierto porcentaje de rayos UVB que envejecen la piel penetren en la piel.
De acuerdo con la Skin Cancer Foundation, el 3 por ciento de los rayos UVB pueden ingresar a la piel con SPF 30 y el 2 por ciento con SPF 50. De esta manera también puede broncearse mientras usa protector solar.
La Academia Estadounidense de Dermatología (American Academy of Dermatology) recomienda usar un protector solar que tenga al menos SPF 30 o más todos los días.
Si va a estar expuesto a la luz solar directa durante largos períodos de tiempo, como al nadar o practicar deportes, puede usar un SPF más alto, como SPF 50 o SPF 100, y volver a aplicarlo con frecuencia.
Sin embargo, hay algunos casos en los que se puede necesitar un FPS más alto, como si tiene antecedentes de cáncer de piel, albinismo o trastornos inmunes que lo hacen arder fácilmente.
Cuando hablar con un dermatólogo
También puede hablar con su dermatólogo sobre el FPS exacto que debe usar. Incluso pueden recomendar ajustar el SPF para ciertas épocas del año, así como su ubicación. Altitudes más altas pueden ponerlo en mayor riesgo de exposición a los rayos UV, al igual que las ubicaciones más cercanas al ecuador.
Es importante ver a su dermatólogo todos los años para una revisión de la piel. Es posible que necesite verlos con más frecuencia si tiene antecedentes recientes de cáncer de piel o se ha bronceado con frecuencia en el pasado.
Consulte a su dermatólogo de inmediato si tiene una lesión cutánea inusual. Cualquier lunar o protuberancia que muestre signos de crecimiento, cambios de color, sangrado o picazón puede justificar una biopsia. Cuanto antes un dermatólogo detecte el cáncer de piel, mejor será el resultado del tratamiento.
El melanoma es el tipo más mortal de cáncer de piel. Broncearse, con o sin protector solar, puede aumentar su riesgo. La detección temprana puede disminuir el riesgo de muerte.
La línea de fondo
Usar protector solar puede prevenir parte de la inflamación de la piel que conduce al bronceado, pero esta no debería ser su principal preocupación cuando se trata de rayos UV.
Usarlo todos los días es esencial para ayudar a proteger su piel contra quemaduras, envejecimiento y cáncer. Asegúrese de volver a aplicar cada 2 horas, así como después de sudar y nadar.
También puede tomar otras medidas preventivas, incluido el uso de ropa protectora, sombreros y gafas de sol. Evitar las horas pico de luz solar entre las 10 a.m. y las 4 p.m. también puede ayudar a minimizar la exposición.
Las camas de bronceado no son alternativas seguras para tomar el sol y deben evitarse.