Descubrir que necesita comenzar a tomar insulina para su diabetes tipo 2 puede hacer que se preocupe. Mantener sus niveles de azúcar en la sangre dentro del rango objetivo requiere un poco de esfuerzo, incluida una dieta saludable, hacer ejercicio y tomar sus medicamentos e insulina según lo recetado.
Pero aunque a veces puede parecer una molestia, la insulina puede ayudarlo a controlar adecuadamente el azúcar en la sangre, mejorar el control de la diabetes y retrasar o prevenir complicaciones a largo plazo, como enfermedades renales y oculares.
Aquí hay 10 consejos sobre cómo hacer que su transición al uso de insulina sea más fácil.
1. Reúnase con su equipo de atención médica
Trabajar en estrecha colaboración con su equipo de atención médica es el primer paso para comenzar con la insulina. Discutirán la importancia de tomar su insulina exactamente como se la recetaron, abordarán sus inquietudes y responderán todas sus preguntas. Siempre debe ser abierto con su médico sobre todos los aspectos de su cuidado de la diabetes y su salud en general.
2. Tranquiliza tu mente
Comenzar a usar insulina no es tan difícil como podría pensar. Los métodos para tomar insulina incluyen bolígrafos, jeringas y bombas. Su médico puede ayudarlo a decidir qué es lo mejor para usted y su estilo de vida.
Es posible que deba comenzar con insulina de acción prolongada. Su médico también puede recomendarle insulina a la hora de las comidas para ayudarlo a controlar sus niveles de azúcar en la sangre. Es posible que cambie a un dispositivo de administración de insulina diferente. Por ejemplo, puede comenzar usando una pluma de insulina y eventualmente comenzar a usar una bomba de insulina.
Cuando se trata de su insulina o su sistema de administración de insulina, no existe un plan único para todos. Si su régimen actual de insulina no funciona para usted, discuta sus preocupaciones con su equipo de atención médica.
3. Aprende sobre la insulina
Su equipo de atención médica puede ayudarlo a aprender diferentes aspectos del manejo del autocuidado de la diabetes. Pueden enseñarle cómo funciona su insulina, cómo administrarla y qué efectos secundarios anticipar.
4. Controle su nivel de azúcar en la sangre
Hable con su médico, un educador certificado en diabetes y otros miembros de su equipo de atención médica sobre su programa de pruebas de azúcar en la sangre, incluido qué hacer cuando está en casa, en la escuela o de vacaciones. Es posible que le pidan que revise su azúcar en la sangre con más frecuencia cuando comience a usar insulina para asegurarse de que esté dentro del rango objetivo.
Pueden ajustar su dosis de insulina con el tiempo dependiendo de las lecturas de azúcar en la sangre. También pueden ajustar su horario de dosificación dependiendo de su:
- necesidades
- peso
- años
- nivel de actividad física
5. Haz preguntas
Su médico y otros miembros de su equipo de atención médica pueden ayudarlo y responder cualquier pregunta que tenga sobre el control de la insulina y la diabetes. Intente mantener una lista escrita y actualizada de preguntas para discutir durante su próxima visita. Almacene esta lista en la sección de notas de su teléfono inteligente o en un pequeño bloc de papel al que pueda acceder fácilmente durante el día.
Mantenga registros detallados de sus niveles de azúcar en la sangre, incluidos sus niveles de ayuno, premeal y post-comidas.
6. Conoce los síntomas
La hipoglucemia, o bajo nivel de azúcar en la sangre, ocurre cuando hay demasiada insulina en el torrente sanguíneo y no llega suficiente azúcar al cerebro y los músculos. Los síntomas pueden ocurrir repentinamente. Pueden incluir:
- siento frio
- inestabilidad
- mareo
- un latido acelerado
- hambre
- náusea
- irritabilidad
- confusión
Asegúrese de tener una fuente de carbohidratos de acción rápida con usted en todo momento en caso de que experimente niveles bajos de azúcar en la sangre. Esto puede ser tabletas de glucosa, dulces duros o jugo. Trabaje en estrecha colaboración con su médico para desarrollar un plan de acción en caso de que ocurra una reacción a la insulina.
La hiperglucemia, o azúcar alta en la sangre, también puede ocurrir. Esta condición se desarrolla lentamente durante varios días cuando su cuerpo no tiene suficiente insulina, lo que hace que aumenten los niveles de azúcar en la sangre. Los síntomas incluyen:
- aumento de la sed y la micción
- debilidad
- respiración dificultosa
- náusea
- vómitos
Si su azúcar en la sangre está muy por encima de su rango objetivo, llame a su médico.
Su médico, enfermera o educador certificado en diabetes puede enseñarle a usted y a su familia sobre los síntomas de niveles bajos o altos de azúcar en la sangre y qué hacer al respecto. Estar preparado puede hacer que sea más fácil controlar su diabetes y disfrutar de la vida.
7. Mantente enfocado en tu estilo de vida saludable
Es muy importante continuar comiendo una dieta saludable y mantenerse físicamente activo cuando comience a tomar insulina. Tener un plan de comidas nutritivas junto con hacer ejercicio regularmente ayudará a mantener sus niveles de azúcar en la sangre dentro de su rango objetivo. Asegúrese de analizar cualquier cambio en su nivel de actividad física con su equipo de atención médica. Es posible que deba controlar su nivel de azúcar en la sangre con más frecuencia y ajustar su horario de comidas o refrigerios si tiene un aumento significativo en su nivel de actividad física.
8. Inyecte su insulina con confianza
Aprenda cómo inyectar insulina de manera adecuada por parte de su médico u otro miembro de su equipo de atención médica. Debe inyectar insulina en la grasa justo debajo de la piel, no en el músculo. Esto ayudará a prevenir diferentes tasas de absorción cada vez que se inyecte. Los lugares comunes para inyectar incluyen:
- estómago
- muslos
- nalgas
- parte superior de los brazos
9. Almacene la insulina adecuadamente
En general, puede almacenar insulina a temperatura ambiente, ya sea abierta o sin abrir, durante diez a 28 días o más. Esto depende del tipo de paquete, la marca de insulina y cómo se inyecta. También puede mantener la insulina en el refrigerador, o entre 36 y 46 ° F (2 a 8 ° C). Puede usar botellas sin abrir que haya mantenido refrigeradas hasta la fecha de caducidad impresa. Su farmacéutico probablemente será la mejor fuente de información sobre cómo almacenar su insulina correctamente.
Aquí hay algunos consejos para un almacenamiento adecuado:
- Siempre lea las etiquetas y use los envases abiertos dentro del período de tiempo recomendado por el fabricante.
- Nunca almacene la insulina a la luz directa del sol, en el congelador, o cerca de conductos de calefacción o aire acondicionado.
- No deje la insulina en un automóvil frío o caliente.
- Use bolsas aisladas para moderar los cambios de temperatura si viaja con insulina.
10. Prepárate
Siempre esté preparado para evaluar su nivel de azúcar en la sangre. Asegúrese de que sus tiras reactivas no hayan caducado y que las haya almacenado correctamente junto con una solución de control. Use identificación de diabetes, como un brazalete de alerta médica, y mantenga una tarjeta en su billetera con información de contacto de emergencia en todo momento.
El objetivo principal en el tratamiento de la diabetes tipo 2 es controlar sus niveles de azúcar en la sangre adecuadamente para reducir el riesgo de complicaciones. Usar insulina no es en absoluto un fracaso. Simplemente es parte de su plan de tratamiento general para mejorar el control de su diabetes. Al conocer todos los aspectos de la terapia con insulina, está listo para dar el siguiente paso para controlar su diabetes.