El cambio de medicamentos para la esclerosis múltiple remitente-recurrente (EMRR) es una ocurrencia común. Esto es especialmente cierto para las terapias modificadoras de la enfermedad (DMT), que se toman para ayudar a controlar la progresión del RRMS.
Actualmente, hay 14 tipos de DMT disponibles. Incluso podría estar tomando un medicamento para el dolor por separado durante las recaídas (conocidos como "ataques"). Si está tomando un antidepresivo, existe la posibilidad de que también cambie los medicamentos en el futuro.
Un tipo de profesional de la salud podría prescribirle una forma o dosis diferente de este tipo de medicamentos. Sin embargo, es importante asegurarse de que todos los miembros de su equipo de atención médica estén informados. Asegúrese de discutir cualquier cambio con los siguientes seis miembros o grupos de personas de inmediato.
1. Tus doctores
Esto puede incluir a su médico de atención primaria, así como a un médico especializado, como un neurólogo. Si su médico de cabecera le receta medicamentos adicionales, debe notificar a su neurólogo. Por ejemplo, algunas personas con EMRR comienzan a experimentar presión arterial alta o recuentos bajos de glóbulos rojos y pueden necesitar algunos medicamentos adicionales. Sus médicos especialistas necesitarán saber sobre estos cambios de medicamentos en caso de que alguno de ellos interactúe con diferentes medicamentos que podrían planear recetarle.
Del mismo modo, si su neurólogo le receta un nuevo DMT, por ejemplo, debe notificar a su médico de atención primaria. Como regla general, su médico de cabecera será su primer contacto si realiza cambios significativos. Los médicos de atención primaria a menudo coordinan la atención con especialistas, no al revés.
2. Otros con RRMS
Antes de hacer cambios de medicamentos, puede considerar comunicarse con otras personas que viven con RRMS. Los cambios de medicamentos son comunes, por lo que es probable que pueda encontrar a alguien que haya estado en su lugar.
Los grupos de apoyo locales son excelentes maneras de conocer a otras personas con EM. Muchos de estos grupos también se centran en temas especializados, como la gestión del tratamiento y el autocuidado. Algunos grupos de apoyo pueden estar en línea.
Discutir los medicamentos con otras personas con RRMS puede ayudarlo a obtener información sobre los pros y los contras del proceso, solo asegúrese de tener en cuenta que los DMT afectan a todos de manera diferente.
Si necesita ayuda para encontrar un grupo, considere consultar la herramienta de ubicación de la National MS Society aquí.
3. Tus terapeutas de rehabilitación
Si ve a terapeutas de rehabilitación, también debe divulgar cualquier cambio de medicación con estas personas. Incluido son:
- fisioterapeutas
- terapeutas ocupacionales
- patólogos del habla / lenguaje
Si bien los terapeutas de rehabilitación no recetan medicamentos ni realizan este tipo de cambios en su plan de tratamiento, están bien versados sobre cómo los medicamentos contra la EM pueden afectar a sus pacientes. Si está probando un nuevo DMT, por ejemplo, entonces su fisioterapeuta podría estar atento a cualquier fatiga inusual como efecto secundario. Además, sus terapeutas de rehabilitación pueden ofrecer nuevas técnicas para controlar sus síntomas o efectos secundarios de los medicamentos.
4. Tu nutricionista
Su nutricionista es otro miembro de su equipo de atención médica que no administra sus medicamentos. Sin embargo, un nutricionista tiene en mente las listas de medicamentos de los clientes para que puedan recomendar planes de comidas de manera más efectiva para ayudar con:
- control de peso
- estreñimiento
- fatiga
- bienestar general
Algunas veces los medicamentos pueden afectar estas preocupaciones. Por ejemplo, un antidepresivo puede causar aumento de peso. Revelar sus listas de medicamentos con su nutricionista puede ayudarlos a comprender mejor dichos efectos. También podrán determinar cuándo los cambios en la dieta ayudarán o no.
5. Especialistas en salud mental
Si consulta a un especialista en salud mental, como un psicólogo o psiquiatra, también deberá compartir los cambios en la medicación del RRMS con ellos. Es posible que vea a un neuropsicólogo para ayudar a controlar los cambios cognitivos. Incluso puede consultar a un psiquiatra para ayudarlo a controlar el estrés, la ansiedad y la depresión asociados con su RRMS.
Estos tipos de especialistas en salud mental pueden recetar medicamentos o suplementos, por lo que deben conocer su plan de tratamiento de EM más actualizado. Esto puede ayudar a prevenir las interacciones farmacológicas. Por ejemplo, si toma dosis altas de ibuprofeno (Advil) para el dolor, es posible que un psiquiatra no pueda recetar ciertos antidepresivos. Esta combinación de medicamentos puede causar sangrado estomacal.
6. Su familia o cuidador
Finalmente, también debe mantener actualizados a sus familiares o cuidadores sobre cualquier cambio relacionado con sus medicamentos RRMS. Esto es especialmente importante si otras personas lo ayudan a administrar sus recetas. Existe el peligro de tomar muy poca o demasiada droga, así como omitir dosis.
Hablar con su familia y cuidadores con anticipación puede ayudarlo a asegurarse de que estén preparados y sean conscientes de los cambios en sus medicamentos de RRMS. De esta manera, pueden estar mejor preparados para ayudarlo en su camino de tratamiento.