¿Qué es el sonambulismo pediátrico?
El sonambulismo pediátrico es cuando un niño se levanta durante el sueño pero no es consciente de sus acciones. También se conoce como sonambulismo. El sonambulismo se observa con mayor frecuencia en niños de entre 4 y 8 años.
La mayoría de los niños que caminan dormidos comienzan a hacerlo una o dos horas después de quedarse dormidos. Los episodios de sonambulismo suelen durar de cinco a 15 minutos. Este comportamiento es típicamente inofensivo y la mayoría de los niños se salen de él. Pero, puede ser peligroso si no se aborda. Es importante proteger a su hijo de posibles lesiones causadas por el sonambulismo.
¿Qué causa el sonambulismo?
Hay una serie de factores que pueden contribuir al sonambulismo. Éstos incluyen:
- fatiga o falta de sueño
- hábitos de sueño irregulares
- estrés o ansiedad
- estar en un ambiente diferente para dormir
- enfermedad o fiebre
- ciertos medicamentos, incluidos sedantes, estimulantes y antihistamínicos
- antecedentes familiares de sonambulismo
Aunque es poco común, el sonambulismo puede ser un síntoma de una afección subyacente. Estas condiciones pueden incluir:
- apnea del sueño (cuando una persona deja de respirar por períodos cortos durante la noche)
- terrores nocturnos (pesadillas dramáticas que ocurren en el sueño profundo)
- migrañas
- síndrome de piernas inquietas (RLS)
- Heridas en la cabeza
¿Cuáles son los síntomas del sonambulismo?
Caminar durante el sueño puede ser el síntoma más común del sonambulismo, pero hay otras acciones asociadas con esta afección.
Los síntomas del sonambulismo pueden incluir:
- sentado en la cama y repitiendo movimientos
- levantarse y caminar por la casa
- hablando o murmurando durante el sueño
- no responde cuando se le habla
- haciendo movimientos torpes
- orinar en lugares inapropiados
- realizar comportamientos rutinarios o repetitivos, como abrir y cerrar puertas
Diagnóstico
Por lo general, un médico puede diagnosticar el sonambulismo basado en las cuentas de otros miembros de la familia sobre el comportamiento del niño. En general, no se necesita tratamiento. Es posible que su médico desee realizar un examen físico y psicológico para descartar otras afecciones que pueden causar sonambulismo. Si otro problema médico está causando el sonambulismo de su hijo, se necesita tratamiento para el problema subyacente.
Si el médico sospecha otro problema de sueño, como la apnea del sueño, puede solicitar un estudio del sueño. Un estudio del sueño implica pasar la noche en un laboratorio de sueño. Los electrodos están unidos a ciertas partes del cuerpo del niño para medir la frecuencia cardíaca, las ondas cerebrales, la frecuencia respiratoria, la tensión muscular, el movimiento de los ojos y las piernas y el nivel de oxígeno en la sangre. Una cámara también puede grabar al niño mientras duerme.
Si el sonambulismo es problemático, su médico puede recomendarle usar una técnica llamada despertar programado. Esto implica monitorear a su hijo durante algunas noches para determinar cuándo ocurre generalmente el sonambulismo y luego despertar a su hijo 15 minutos antes del esperado sonambulismo. Esto puede ayudar a restablecer el ciclo de sueño del niño y controlar el comportamiento del sonambulismo.
Si el sonambulismo está causando comportamientos peligrosos o fatiga excesiva, un médico puede recetar medicamentos, como benzodiacepinas (medicamentos psicoactivos que generalmente se recetan para tratar la ansiedad) o antidepresivos.
Tratamientos de sonambulismo
Si nota que su hijo camina sonámbulo, trate de guiarlo suavemente hacia la cama. No intentes despertar al sonámbulo, ya que esto podría agravarlos. En cambio, simplemente tranquilice a su hijo con palabras y ayúdelo a llevarlo de regreso a la cama.
También hay medidas de seguridad que se pueden tomar en la casa para ayudar a mantener a su hijo seguro. Éstos incluyen:
- cerrar y cerrar todas las puertas y ventanas por la noche
- instalando alarmas en puertas y ventanas, o instalando cerraduras fuera del alcance de su hijo
- eliminar elementos que podrían ser un peligro de tropiezo
- quitar objetos afilados y frágiles de la cama de su hijo
- no dejar que su hijo duerma en una litera
- Instalar puertas de seguridad frente a escaleras o puertas
- bajar la temperatura del calentador de agua para evitar quemaduras
- mantener las llaves fuera del alcance
Prevención de sonambulismo
Ayudar a su hijo a desarrollar buenos hábitos de sueño y técnicas de relajación puede ayudar a prevenir el sonambulismo.
Pruebe lo siguiente para ayudar a prevenir el sonambulismo:
- Acuéstate a la misma hora todas las noches.
- Establezca una rutina relajante antes de acostarse, como tomar un baño tibio o escuchar música relajante.
- Cree un ambiente de sueño oscuro, tranquilo y cómodo para su hijo.
- Baje la temperatura en la habitación de su hijo a menos de 75 ° F (24 ° C).
- Limite los líquidos antes de acostarse y asegúrese de que su hijo vacíe su vejiga antes de acostarse.
- Evite la cafeína y el azúcar antes de acostarse.
Hable con su médico si tiene otras preocupaciones. Hágales saber si el sonambulismo de su hijo continúa por un tiempo prolongado.