¿Qué es la corioamnionitis?
La corioamnionitis es una infección bacteriana que ocurre antes o durante el parto. El nombre se refiere a las membranas que rodean al feto: el "corion" (membrana externa) y el "amnios" (saco lleno de líquido).
La condición ocurre cuando las bacterias infectan el corion, amnios y líquido amniótico alrededor del feto. Puede provocar un parto prematuro o una infección grave en la madre y el bebé. Se ve con mayor frecuencia en los nacimientos prematuros; También se observa en aproximadamente del 2 al 4 por ciento de las entregas a término.
La corioamnionitis también se conoce como "amnionitis" o "infección intraamniótica".
¿Qué lo causa?
Esta condición generalmente se desarrolla debido a una infección que puede ocurrir cuando las bacterias que normalmente están presentes en la vagina ascienden al útero, donde se encuentra el feto.
E. coli, estreptococos del grupo B y bacterias anaerobias son las causas más comunes de corioamnionitis.
El líquido amniótico y la placenta, y el bebé, pueden infectarse.
¿Cuales son los sintomas?
La corioamnionitis no siempre causa síntomas, pero algunas mujeres pueden experimentar:
- fiebre
- latidos rápidos
- sensibilidad uterina
- líquido amniótico descolorido y maloliente
¿Cuáles son los factores de riesgo?
Los factores de riesgo más comunes para esta afección incluyen:
- edad materna joven (menos de 21 años)
- bajo nivel socioeconómico
- primer embarazo
- trabajo largo
- membranas rotas (el agua se ha roto) durante un período prolongado de tiempo
- nacimiento prematuro
- Exámenes vaginales múltiples durante el trabajo de parto (solo un factor de riesgo en mujeres con membranas rotas)
- infecciones preexistentes del tracto genital inferior
- monitoreo interno fetal o uterino
Si tiene uno o más de estos factores de riesgo, es más probable que desarrolle corioamnionitis.
¿Cuáles son las complicaciones?
La corioamnionitis generalmente se considera una emergencia médica. La afección puede provocar complicaciones graves, que incluyen:
- bacteriemia (infección en el torrente sanguíneo)
- endometritis (infección en el revestimiento del útero)
- necesidad de parto por cesárea
- gran pérdida de sangre con el parto
- coágulos de sangre en los pulmones y la pelvis
Alrededor del 3 al 12 por ciento de las mujeres con corioamnionitis tienen bacteriemia. Esta condición también aumenta la necesidad de un parto por cesárea. De aquellos que tienen un parto por cesárea, hasta el 8 por ciento desarrolla una infección de la herida y aproximadamente el 1 por ciento desarrolla un absceso pélvico (acumulación de pus). La muerte materna por infección es extremadamente rara.
Los bebés entregados a madres con corioamnionitis también corren peligro de complicaciones graves:
- La afección puede provocar meningitis (una infección del revestimiento del cerebro y la médula espinal). Sin embargo, esto ocurre en menos del 1 por ciento de los bebés que son entregados a término.
- La neumonía o bacteriemia también puede desarrollarse en alrededor del 5 al 10 por ciento de los bebés nacidos de mujeres con corioamnionitis. La bacteriemia es más común en los recién nacidos prematuros.
En casos raros, las complicaciones asociadas con la corioamnionitis pueden ser potencialmente mortales para los recién nacidos prematuros.
Es menos probable que ocurran estas complicaciones si la infección se diagnostica temprano y se inicia el tratamiento con antibióticos.
¿Cómo se diagnostica?
Su médico generalmente puede diagnosticar esta afección realizando un examen físico. Las pruebas de laboratorio pueden confirmar ese diagnóstico.
La amniocentesis puede ser necesaria si está en trabajo de parto prematuro. En esta prueba prenatal, se extrae una pequeña cantidad de líquido amniótico para la prueba. Puede tener corioamnionitis si el líquido amniótico tiene una baja concentración de glucosa (azúcar) y una alta concentración de glóbulos blancos (WBC) y bacterias.
Como es tratado?
Una vez que le diagnostiquen corioamnionitis, recibirá un tratamiento inmediato para prevenir complicaciones.
El tratamiento temprano puede bajar la fiebre, acortar el tiempo de recuperación y disminuir el riesgo de infección y complicaciones de su bebé.
Los antibióticos se usan comúnmente para tratar la afección. Por lo general, se administran por vía intravenosa y se continúan hasta que haya dado a luz a su bebé. Puede recibir algunos de los siguientes antibióticos:
- ampicilina (Principen)
- penicilina (PenVK)
- gentamicina (garamicina)
- clindamicina (Cleocin)
- metronidazol (Flagyl)
Cuando la infección responde al tratamiento, su médico dejará de administrar antibióticos. Podrá salir del hospital después de que ya no tenga fiebre y su médico considere que puede regresar a su hogar de manera segura.
La mayoría de las personas no requieren antibióticos orales de forma ambulatoria.
¿Cuál es el pronóstico a largo plazo para las personas con corioamnionitis?
El pronóstico a largo plazo para las madres con corioamnionitis es excelente. La fertilidad futura rara vez se ve comprometida.
Las perspectivas para los bebés entregados a madres infectadas también son muy buenas.
Pero algunos bebés, particularmente aquellos que son prematuros, pueden tener complicaciones a largo plazo. Estas complicaciones pueden incluir enfermedad pulmonar o deterioro de la función cerebral.
¿Cómo puede ser prevenido?
En primer lugar, su médico hará todo lo posible para evitar que se desarrolle la infección. Pueden hacer esto de varias maneras, como:
- detección de vaginosis bacteriana (inflamación vaginal) en su segundo trimestre
- detección de infección por estreptococos del grupo B una vez que alcance las 35 a 37 semanas de embarazo
- Reducir el número de exámenes vaginales realizados durante el parto.
- minimizando la frecuencia de monitoreo interno
Es importante asistir a chequeos regulares con su médico y abordar sus preguntas e inquietudes.