¿Qué es la cirugía ocular ICL?
Una lente de colchón implantable (ICL) es una lente artificial que se implanta permanentemente en el ojo. La lente se usa para tratar:
- miopía (miopía)
- hipermetropía (hipermetropía)
- astigmatismo
Implantar una ICL requiere cirugía. Un cirujano coloca la lente entre la lente natural del ojo y el iris de color. La lente trabaja la lente existente del ojo para doblar (refractar) la luz en la retina, lo que produce una visión más clara.
La ICL está hecha de plástico y un colágeno llamado colamer. Es un tipo de lente introcular fáquica. "Phakic" se refiere a cómo se coloca la lente en el ojo sin sacar la lente natural.
Aunque la cirugía ICL no es necesaria para corregir problemas de visión, puede eliminar o reducir la necesidad de anteojos o lentes de contacto.
También es una posible alternativa para las personas que no pueden someterse a una cirugía ocular con láser. Pero como la mayoría de los procedimientos, la cirugía ICL no es para todos.
Cirugía ICL
Visitará a su oftalmólogo una semana antes de la cirugía. Usarán un láser para hacer pequeños orificios entre la parte frontal del ojo (cámara anterior) y la lente natural. Esto evitará la presión y la acumulación de líquido en el ojo después del procedimiento.
También podría recibir antibióticos o gotas para los ojos antiinflamatorios varios días antes de la cirugía.
El procedimiento lo realiza un cirujano ocular. En general, esto es lo que sucede:
- Te acostarás boca arriba. Se le administrará un anestésico local o tópico leve. Esto adormece tu ojo para que no sientas nada.
- Es posible que le den un sedante suave para ayudarlo a relajarse. También puede recibir una inyección alrededor del ojo para evitar temporalmente que lo mueva.
- Su cirujano limpiará el ojo y el área que lo rodea. Sus párpados se mantendrán abiertos con una herramienta llamada espéculo de tapa.
- Su cirujano hará una pequeña incisión en su ojo. Le pondrán un lubricante para proteger su córnea.
- Insertarán la ICL a través de la incisión. La lente es muy delgada, por lo que puede doblarse y luego desplegarse en el ojo.
- Su cirujano removerá el lubricante. Dependiendo de la incisión, pueden cerrar la abertura con pequeños puntos.
- Pondrán gotas o ungüento en el ojo y luego lo cubrirán con un parche.
El procedimiento lleva de 20 a 30 minutos. Después, lo llevarán a una sala de recuperación donde lo supervisarán de cerca durante unas horas.
Su médico puede recetarle gotas para los ojos o medicamentos orales para el dolor. Puede irse a casa el mismo día, pero necesitará un aventón.
Tendrá una cita de seguimiento al día siguiente. Su cirujano examinará el ojo y verificará su progreso.
Dentro del próximo año, tendrá visitas de seguimiento 1 mes y 6 meses después de la cirugía. Su médico también le pedirá que regrese para chequeos regulares una vez al año.
Beneficios de tener una lente de collares implantable
Además de mejorar la visión, existen numerosos beneficios de una ICL:
- Puede reparar la miopía severa que no se puede corregir con otras cirugías.
- Es menos probable que la lente cause ojos secos, lo cual es ideal si sus ojos están crónicamente secos.
- Está destinado a ser permanente, pero se puede eliminar.
- La lente proporciona una excelente visión nocturna.
- La recuperación generalmente es rápida porque el tejido no se elimina.
- Las personas que no pueden someterse a una cirugía ocular con láser podrían ser buenos candidatos para la ICL.
Riesgos de ICL
Aunque se ha demostrado que la cirugía ICL es segura, puede causar complicaciones como:
- Glaucoma. Si la ICL es demasiado grande o no está colocada correctamente, puede aumentar la presión en su ojo. Esto puede conducir al glaucoma.
- Pérdida de la visión. Si tiene presión ocular alta durante demasiado tiempo, puede experimentar pérdida de visión.
- Cataratas tempranas. Una ICL puede disminuir la circulación de líquido en el ojo, lo que aumenta el riesgo de cataratas. Esto también podría suceder si la ICL no tiene el tamaño adecuado o causa inflamación crónica.
- Visión borrosa. La visión borrosa es un síntoma de cataratas y glaucoma. También puede tener otros problemas visuales, como deslumbramiento o visión doble, si la lente no tiene el tamaño correcto.
- Córnea nublada. La cirugía ocular, junto con la edad, reduce las células endoteliales en su córnea. Si las células disminuyen demasiado rápido, puede desarrollar una córnea turbia y pérdida de visión.
- Desprendimiento de retina. La cirugía ocular también aumenta el riesgo de que su retina se desprenda de su posición habitual. Es una complicación rara que requiere atención de emergencia.
- Infección ocular. Este también es un efecto secundario poco común. Puede provocar una pérdida de visión permanente.
- Cirugía adicional Es posible que necesite otra cirugía para quitar la lente y corregir problemas relacionados.
Precauciones
La cirugía ICL no es segura para todos. Al considerar el procedimiento, hable con un médico para determinar si es adecuado para usted.
La cirugía puede no ser una buena opción si usted:
- están embarazadas o amamantando
- son menores de 21 años
- son mayores de 45 años
- tiene una enfermedad crónica que causa fluctuaciones hormonales
- están tomando medicamentos asociados con cambios en la visión
- tiene una afección que inhibe la cicatrización adecuada
- no cumple con los requisitos mínimos para el recuento de células endoteliales
Antes de la cirugía, también deberá tomar otras precauciones. Por ejemplo, deberá dejar de usar lentes de contacto en las semanas previas al procedimiento.
Su médico puede explicarle las mejores medidas de seguridad para su situación.
Cirugía ICL vs. LASIK
LASIK es otro tipo de cirugía ocular. Al igual que la cirugía ICL, también se usa para tratar la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo. Pero en lugar de la implantación de una lente permanente, utiliza un láser para corregir problemas de visión.
LASIK significa queratomileusis in situ asistida por láser.
Un cirujano usa un láser de corte para cortar una aleta en la parte frontal del ojo. Luego, usan un láser programado para eliminar un pedazo delgado de tejido de la córnea. Esto permite que la luz se refracte en la retina, lo que mejora la visión.
Cuando se realiza la cirugía, el colgajo vuelve a su posición normal. Por lo general, no necesita puntos de sutura para sanar.
Como LASIK elimina el tejido de la córnea, es posible que no sea un buen candidato si tiene una córnea delgada o irregular. En este caso, la cirugía ICL podría ser una mejor opción.
Para llevar
La cirugía ICL puede reducir permanentemente su dependencia de anteojos o lentes de contacto.
Por lo general, la cirugía dura unos 30 minutos y la recuperación es rápida. El procedimiento también se considera seguro, pero puede causar efectos secundarios como cataratas o pérdida de visión.
Su médico puede ayudarlo a decidir si la cirugía ICL es segura para usted. Considerarán factores como su edad, salud ocular e historial médico.