Visión general
La hepatitis C aumenta su riesgo de inflamación, daño a su hígado y cáncer de hígado. Durante y después del tratamiento para el virus de la hepatitis C (VHC), su médico puede recomendar cambios en la dieta y el estilo de vida para ayudar a minimizar el daño hepático a largo plazo. Esto puede incluir mantenerse alejado de ciertos medicamentos.
Su hígado funciona al filtrar la sangre de su tracto gastrointestinal (GI). También elimina las toxinas de las sustancias químicas con las que puede entrar en contacto y metaboliza los medicamentos.
Tener una enfermedad hepática como la hepatitis C aumenta el riesgo de daño por tomar ciertos medicamentos, suplementos herbales y vitaminas. Este efecto se conoce como daño hepático inducido por productos químicos o hepatoxicidad.
Los síntomas de hepatoxicidad pueden incluir:
- dolor abdominal, especialmente en el área superior derecha de su abdomen
- ictericia, que es cuando su piel y el blanco de sus ojos se vuelven amarillos
- orina oscura
- fatiga
- náuseas o vómitos
- fiebre
- picazón y erupción cutánea
- pérdida de apetito y pérdida de peso posterior
Si tiene hepatitis C aguda o crónica, hable con su médico acerca de si debe o no tomar los siguientes medicamentos y suplementos.
Paracetamol
El acetaminofén es un analgésico de venta libre (OTC) más comúnmente conocido como la marca Tylenol. También se encuentra en ciertos medicamentos para el resfriado y la gripe.
A pesar de su amplia disponibilidad, el acetaminofeno puede ponerlo en riesgo de daño hepático. El riesgo es mayor cuando toma acetaminofeno en grandes dosis o en pequeñas dosis durante un período prolongado.
Estos riesgos se aplican independientemente de si tiene una enfermedad hepática preexistente. Por lo tanto, el acetaminofeno puede no ser su mejor fuente de alivio del dolor cuando tiene hepatitis C.
Sin embargo, faltan pautas clínicas sobre el uso de acetaminofén para personas con hepatitis C. Las dosis bajas y temporales pueden ser seguras para algunas personas. Pero si tiene cirrosis hepática o bebe alcohol regularmente, su médico puede recomendarle que lo evite.
Algunos expertos recomiendan realizar pruebas de hepatoxicidad cada 3 a 6 meses en personas con hepatitis C crónica y que toman acetaminofén de forma regular.
Es importante hablar con su médico antes de usarlo para determinar si este medicamento podría empeorar cualquier daño hepático existente. Si su médico lo aprueba, no debe tomar más de 2,000 mg por día, y no más de 3 a 5 días a la vez.
Amoxicilina
La amoxicilina es un tipo común de antibiótico utilizado para tratar infecciones bacterianas. Sin embargo, también puede aumentar su riesgo de hepatoxicidad. Si bien estos efectos se consideran raros en personas sanas, tener antecedentes de enfermedad hepática puede aumentar su riesgo de daño hepático inducido por medicamentos.
Si tiene VHC y experimenta una infección que requiere un antibiótico, puede informar a su médico. Es posible que le receten otro medicamento para tratar su infección bacteriana.
Ciertos analgésicos
Los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) son otra clase común de analgésicos de venta libre. Estos están disponibles en versiones genéricas y de marca de aspirina e ibuprofeno, así como medicamentos para el resfriado y la gripe.
Algunos expertos sugieren evitar los AINE en ciertas situaciones. Las personas con VHC crónico que no tienen cirrosis pueden tolerar los AINE a dosis bajas sin riesgo de hepatoxicidad. Sin embargo, es mejor evitar los AINE por completo si tiene cirrosis además de la hepatitis C crónica.
Suplementos y hierbas
Los remedios complementarios y alternativos están en aumento, incluidos los destinados a la salud del hígado. Pero si tiene hepatitis C, tomar ciertos suplementos y hierbas puede causar más daño que bien. Además, ciertos remedios pueden interactuar con sus medicamentos.
Un suplemento para evitar es el hierro. La sobrecarga de hierro ya es frecuente en muchas personas con hepatitis C y enfermedad hepática. El hierro está disponible en la mayoría de las multivitaminas de venta libre como un medio para prevenir la anemia por deficiencia de hierro. A menos que tenga anemia y se le indique lo contrario, debe elegir un multivitamínico sin hierro.
Demasiada vitamina A también puede causar hepatoxicidad en personas con hepatitis C. Los expertos recomiendan limitar su ingesta diaria de vitamina A a menos de 5,000 unidades internacionales (UI) por día.
Ciertas hierbas también pueden ser peligrosas cuando tienes una infección por VHC. Este es el caso de la hierba de San Juan, una hierba que a menudo se toma para la depresión, aunque sus beneficios no están claros. La hierba de San Juan puede interferir con sus tratamientos para la hepatitis C y hacerlos menos efectivos, por lo que es mejor evitarlo.
Otras hierbas potencialmente dañinas para el hígado que pueden aumentar su riesgo de hepatoxicidad incluyen:
- cohosh negro
- chaparral
- consuelda
- cardo de rueca
- germander
- celidonia mayor
- kava
- extracto de arroz de levadura roja
- casquete
- yohimbe
Hable con su médico sobre todos los medicamentos, suplementos y hierbas que toma o está considerando tomar. Esto incluye medicamentos que puede comprar sin receta médica.
Incluso si tienen etiquetas "naturales", esto no significa que sean seguras para su hígado en este momento. Su médico también puede recomendar análisis de sangre periódicos para asegurarse de que esté obteniendo el nivel adecuado de nutrientes de los alimentos y cualquier multivitamínico que tome.
La comida para llevar
Si bien ciertos medicamentos y suplementos pueden ayudar a mejorar su salud y calidad de vida, no todas las sustancias son seguras para las personas con hepatitis C. Puede ser especialmente vulnerable si tiene VHC crónico o daño hepático y cicatrices. Hable con su médico antes de probar cualquier medicamento o suplemento nuevo.