¿Qué es una emergencia hipertensiva?
La hipertensión, o presión arterial alta, es una condición común. Afecta a 1 de cada 3 adultos estadounidenses, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Las pautas para diagnosticar y tratar la presión arterial alta del American College of Cardiology y la American Heart Association han cambiado recientemente. Los expertos ahora predicen que casi la mitad de los adultos estadounidenses tendrán presión arterial alta.
La presión arterial alta se diagnostica si ocurre uno o ambos de los siguientes:
- Su presión arterial sistólica es constantemente superior a 130.
- Su presión arterial diastólica es constantemente superior a 80.
La presión arterial alta generalmente es manejable si sigue los consejos de su médico.
Aunque no es común, algunas personas con presión arterial alta pueden tener un aumento rápido de la presión arterial por encima de 180/120 milímetros de mercurio (mm Hg). Esto se conoce como una crisis hipertensiva.
Si una persona con una presión arterial de 180/120 mm Hg o más también tiene síntomas nuevos, especialmente los relacionados con los ojos, el cerebro, el corazón o los riñones, esto se conoce como una emergencia hipertensiva. Las emergencias hipertensivas se conocían previamente, en algunos casos, como hipertensión maligna.
Una emergencia hipertensiva requiere atención médica inmediata. Los síntomas indican que se está produciendo daño a los órganos. Si no recibe tratamiento de emergencia, puede desarrollar problemas de salud graves, como:
- infarto de miocardio
- carrera
- ceguera
- insuficiencia renal
Una emergencia hipertensiva también puede ser mortal.
¿Cuáles son los síntomas de una emergencia hipertensiva?
La presión arterial alta se conoce comúnmente como el "asesino silencioso". Esto se debe a que no siempre tiene signos o síntomas obvios. A diferencia de la presión arterial alta moderada, una emergencia hipertensiva tiene síntomas muy notables. Los síntomas pueden incluir:
- cambios en la visión, incluida visión borrosa
- dolor en el pecho
- confusión
- náuseas o vómitos
- entumecimiento o debilidad en los brazos, piernas o cara
- dificultad para respirar
- dolor de cabeza
- producción de orina reducida
Una emergencia hipertensiva también puede provocar una afección conocida como encefalopatía hipertensiva. Esto afecta directamente al cerebro. Los síntomas de este trastorno incluyen:
- dolor de cabeza intenso
- visión borrosa
- confusión o lentitud mental
- letargo
- incautación
¿Qué causa una emergencia hipertensiva?
Las emergencias hipertensivas ocurren principalmente en personas con antecedentes de presión arterial alta. También es más común en afroamericanos, hombres y personas que fuman. Es especialmente común en personas cuya presión arterial ya está por encima de 140/90 mm Hg. Según una revisión clínica de 2012, aproximadamente del 1 al 2 por ciento de las personas con presión arterial alta desarrollan emergencias hipertensivas.
Algunas condiciones de salud aumentan sus posibilidades de tener una emergencia hipertensiva. Éstos incluyen:
- trastornos renales o insuficiencia renal
- el uso de drogas como cocaína, anfetaminas, píldoras anticonceptivas o inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO)
- el embarazo
- preeclampsia, que es común después de las 20 semanas de gestación, pero a veces puede ocurrir más temprano en el embarazo o incluso después del parto
- Enfermedades autoinmunes
- lesiones de la médula espinal que causan que partes del sistema nervioso se vuelvan hiperactivas
- estenosis renal, que es un estrechamiento de las arterias de los riñones
- un estrechamiento de la aorta, el vaso sanguíneo principal que sale del corazón
- no tomar su medicamento para la presión arterial alta
Si tiene presión arterial alta y desarrolla algún cambio en sus síntomas normales, busque atención médica inmediata. También busque atención médica inmediata si desarrolla nuevos síntomas relacionados con una emergencia hipertensiva.
¿Cómo se diagnostica una emergencia hipertensiva?
Su médico le preguntará acerca de su historial de salud, incluidos los tratamientos que recibe para la presión arterial alta. También medirán su presión arterial y analizarán cualquier síntoma que tenga actualmente, como cambios en la visión, dolor en el pecho o falta de aliento. Esto ayudará a su médico a determinar si se necesita o no un tratamiento de emergencia.
Determinación del daño orgánico
Se pueden usar otras pruebas para ver si su afección está causando daño a los órganos. Por ejemplo, se pueden ordenar análisis de sangre que miden el nitrógeno ureico en sangre (BUN) y los niveles de creatinina.
La prueba BUN mide la cantidad de productos de desecho de la descomposición de proteínas en el cuerpo. La creatinina es un químico producido por la descomposición de los músculos. Sus riñones lo limpian de su sangre. Cuando los riñones no funcionan normalmente, estas pruebas tendrán resultados anormales.
Su médico también puede ordenar lo siguiente:
- análisis de sangre para verificar si hay un ataque al corazón
- un ecocardiograma o ultrasonido para observar la función cardíaca
- un examen de orina para verificar la función renal
- Un electrocardiograma (ECG o EKG) para medir el funcionamiento eléctrico del corazón.
- una ecografía renal para buscar problemas renales adicionales
- un examen de la vista para determinar si se ha producido daño en el ojo
- una tomografía computarizada o una resonancia magnética del cerebro para detectar hemorragia o accidente cerebrovascular
- Una radiografía de tórax para observar el corazón y los pulmones.
¿Cómo se trata una emergencia hipertensiva?
Una emergencia de hipertensión puede poner en peligro la vida y requiere atención médica inmediata. Debe recibir tratamiento de inmediato para reducir su presión arterial de manera segura y evitar complicaciones peligrosas.
El tratamiento generalmente incluye el uso de medicamentos para la presión arterial alta o medicamentos antihipertensivos, administrados por vía intravenosa o por vía intravenosa. Esto permite una acción inmediata. Por lo general, necesitará tratamiento en la sala de emergencias y en la unidad de cuidados intensivos.
Una vez que su presión arterial se estabilice, su médico le recetará medicamentos orales para la presión arterial. Estos medicamentos le permitirán controlar su presión arterial en el hogar.
Si recibe un diagnóstico de emergencia hipertensiva, deberá seguir las recomendaciones de su médico. Esto incluirá realizarse chequeos regulares para controlar su presión arterial y continuar tomando sus medicamentos de manera regular.
¿Cómo se puede prevenir una emergencia hipertensiva?
Algunos casos de emergencias hipertensivas pueden prevenirse. Si tiene presión arterial alta, es importante que controle su presión arterial regularmente. También es importante que tome todos los medicamentos recetados sin perder ninguna dosis. Intente también mantener un estilo de vida saludable y siga los consejos de su médico.
Asegúrese de tratar cualquier condición de salud en curso que pueda ponerlo en riesgo de una emergencia hipertensiva. Busque tratamiento inmediato si desarrolla algún síntoma. Necesitará atención urgente para ayudar a reducir el daño a los órganos.
Consejos para bajar la presión arterial
Para bajar la presión arterial, sigue estos consejos:
- Adopte una dieta saludable para reducir su presión arterial. Pruebe los enfoques dietéticos para detener la dieta de la hipertensión (DASH). Incluye comer frutas, verduras, productos lácteos bajos en grasa, alimentos ricos en potasio y granos integrales. También incluye evitar o limitar las grasas saturadas.
- Limite su consumo de sal a 1,500 miligramos (mg) por día si es afroamericano, tiene más de 50 años o si tiene diabetes, hipertensión o enfermedad renal crónica (ERC). Tenga en cuenta que los alimentos procesados pueden tener un alto contenido de sodio.
- Haga ejercicio por un mínimo de 30 minutos por día.
- Baje de peso si tiene sobrepeso.
- Maneja tu estrés. Incorpora técnicas de manejo del estrés, como la respiración profunda o la meditación, en tu día a día.
- Si fuma, deje de fumar.
- Limite las bebidas alcohólicas a dos por día si es hombre y una bebida por día si es mujer o tiene más de 65 años.
- Controle su presión arterial en casa con un brazalete automático.