En un día brillante de septiembre pasado, un grupo de turistas se acercó al histórico anfiteatro en el Golden Gate Park de San Francisco. Se arrastraron por el escenario y gradualmente se unieron a la celebración, bailando al ritmo de la música que llegó a la multitud.
Una mujer del grupo me pidió que les tomara una foto. Ella preguntó de qué se trataba el festival. Cuando le dije que estábamos creando conciencia sobre la enfermedad hepática, su boca se abrió.
La celebración que tuvo lugar a nuestro alrededor fue la caminata anual de la Fundación Americana del Hígado. La mujer miró a su alrededor maravillada. La emoción era eléctrica. Este tipo de alegría no es lo que generalmente se espera de las personas que luchan contra una enfermedad.
El frente del parque tenía grandes columnas de globos que enmarcaban a un DJ, que tocaba música de baile alegre. Más globos en la parte trasera del parque marcaron la línea de meta del Paseo del Hígado. Allí, los voluntarios vitorearon mientras las familias y amigos completaban su vuelta de la victoria.
En todo el parque, vendedores y puestos ofrecieron información, premios, pintura facial, bocadillos saludables y golosinas para todos. En el fotomatón Healthline, la risa flotó en el parque mientras se capturaban recuerdos preciosos.
Las familias, amigos e individuos se habían unido con un objetivo en mente: hacer su contribución a la American Liver Foundation (ALF). Algunas familias caminaron con un ser querido que vive con enfermedad hepática. Otros celebraron el trasplante de hígado o la victoria sobre el cáncer de hígado. Y algunos grupos vinieron como un homenaje conmemorativo a un ser querido que había perdido la batalla con la enfermedad hepática.
El Paseo del Hígado en San Francisco es solo una parte de un esfuerzo de costa a costa para crear conciencia y fondos para combatir la enfermedad hepática. La recaudación de fondos proporciona los recursos necesarios para la investigación en la búsqueda de nuevos tratamientos. La educación pública hace correr la voz sobre cómo prevenir la enfermedad hepática. El ALF también brinda apoyo a las personas y familias que más lo necesitan.
Cuando las personas se unen para ayudarse entre sí, siempre es una celebración. En el Paseo del Hígado, la dedicación de cada persona se ve en la vida de las generaciones futuras que se beneficiarán de los programas y servicios proporcionados. Sí, los vítores al final de cada evento son un acto entusiasta y decidido contra la enfermedad hepática.
Tomé una foto del grupo de turistas, quienes sonrieron ampliamente junto a la pancarta del ALF. Con los corazones abiertos y los pies bailando, continuamos la celebración. El ALF y todos sus partidarios habían completado otra caminata triunfal del hígado en el parque, y tenemos las fotos para mostrarlo.