¿Qué es un absceso cutáneo?
Un absceso cutáneo, también llamado ebullición, es una protuberancia que aparece dentro o debajo de la superficie de la piel. Esta protuberancia generalmente está llena de pus o líquido translúcido. Por lo general, se debe a una infección bacteriana.
Un absceso cutáneo puede aparecer en cualquier parte del cuerpo. Sin embargo, los abscesos se desarrollan con mayor frecuencia en la espalda, la cara, el pecho o las nalgas. Los abscesos de la piel también pueden aparecer en áreas de crecimiento del cabello, como las axilas o la ingle.
La mayoría de los abscesos cutáneos son inofensivos y pueden desaparecer sin tratamiento. Las cremas y medicamentos de venta libre (OTC) pueden ser todo lo que se necesita para ayudar a acelerar el proceso de curación de un absceso menor. A veces, los abscesos de la piel son más difíciles de tratar y pueden requerir laceración o drenaje.
Hay casos en los que un absceso puede provocar complicaciones graves y potencialmente mortales si no se trata.
Causas comunes de un absceso cutáneo
Las bacterias
El estafilococo es la causa bacteriana más común de abscesos cutáneos. Un absceso cutáneo puede ser el resultado de una infección bacteriana que ocurre cuando la bacteria Staphylococcus aureus ingresa al cuerpo a través de un folículo piloso o a través de una herida o lesión que ha perforado o roto la piel.
Usted tiene un mayor riesgo de esta infección bacteriana si tiene:
- contacto cercano con una persona que tiene una infección por estafilococos, por lo que estas infecciones son más comunes en los hospitales
- una enfermedad crónica de la piel, como acné o eczema
- diabetes
- un sistema inmunitario debilitado, que puede ser causado por infecciones como el VIH
- malos hábitos de higiene
Folículos capilares infectados
Los folículos pilosos infectados, o foliculitis, pueden causar la formación de abscesos en el folículo. Los folículos pueden infectarse si el cabello dentro del folículo queda atrapado y no puede atravesar la piel, como puede suceder después del afeitado.
Los folículos capilares atrapados se conocen comúnmente como pelos encarnados. Los vellos encarnados pueden preparar el escenario para una infección. Los abscesos que están sobre o en un folículo piloso a menudo contendrán este vello encarnado.
La foliculitis también puede ocurrir después de pasar tiempo en una piscina o bañera de hidromasaje con cloro inadecuado.
Identificar un absceso cutáneo
Un absceso a menudo aparece como una protuberancia en la piel, similar a un grano. Sin embargo, puede crecer con el tiempo y parecerse a un quiste lleno de líquido. Dependiendo de la causa del absceso, también pueden estar presentes otros síntomas. Estos síntomas pueden incluir:
- fiebre
- náusea
- resfriado
- hinchazón
- lesiones en la piel
- piel inflamada
- drenaje de líquido del absceso
El área alrededor del absceso también puede sentirse dolorosa y cálida al tacto.
Diagnosticar un absceso
Un pequeño hervor no suele ser motivo de preocupación. A menudo puedes tratarlo en casa. Sin embargo, si tiene un forúnculo y cualquiera de los siguientes se aplica a usted, consulte a su médico lo antes posible:
- Eres un niño
- Tienes más de 65 años.
- Tiene un sistema inmunitario debilitado o fue hospitalizado recientemente.
- Has recibido un trasplante de órgano.
- Actualmente está recibiendo quimioterapia o recientemente recibió quimioterapia.
- Su absceso de la piel está en su cara o columna vertebral. Si no se trata, el absceso puede extenderse a su cerebro o médula espinal.
- El absceso es grande, no se ha curado en dos semanas y también tiene fiebre.
- El absceso parece extenderse a otras partes de su cuerpo.
- El absceso se vuelve más doloroso o palpitante.
- Sus extremidades están hinchadas.
- Su piel alrededor del absceso está hinchada o extremadamente roja.
Su médico revisará su historial médico y realizará un examen físico para inspeccionar visualmente el absceso. Un examen físico completo le permite a su médico determinar si una lesión o cabello encarnado es la causa del absceso.
Su médico también puede tomar un cultivo o una pequeña cantidad de líquido del absceso para detectar la presencia de bacterias. No se necesitan otros métodos de prueba para diagnosticar un absceso.
Sin embargo, si ha tenido abscesos cutáneos recurrentes y su médico considera que una causa médica subyacente puede ser la causa, pueden tomar una muestra de sangre u orina.
Complicaciones de un absceso cutáneo
En algunos casos, un absceso puede causar complicaciones graves. Estos pueden incluir:
- la propagación de la infección, potencialmente al cerebro o la médula espinal
- envenenamiento de la sangre o sepsis
- endocarditis, que es una infección del revestimiento interno del corazón
- el desarrollo de nuevos abscesos
- muerte tisular en el área del absceso, como gangrena
- una infección ósea aguda u osteomielitis
Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (MRSA) es otra complicación potencial. MRSA es una cepa de la bacteria resistente a los medicamentos que comúnmente causa abscesos en la piel. Si bien existen antibióticos alternativos para tratar esta cepa, no siempre funcionan.
Como tratar un absceso cutáneo
Opciones de tratamiento en el hogar
Por lo general, puede tratar un absceso cutáneo en casa. Aplicar calor al absceso puede ayudarlo a encogerse y drenar.
La forma más útil de aplicar calor es colocar una compresa tibia sobre el absceso. Puede hacer una compresa tibia dejando correr agua tibia sobre una toalla facial y doblándola antes de colocarla sobre el absceso.
Drenaje
Consulte a su médico si el absceso es terco y no se cura con métodos caseros. Es posible que quieran drenarlo.
Para drenar el absceso, su médico aplicará medicamentos anestésicos y luego lo abrirá para permitir que salga el líquido. Después de que el absceso se drena, su médico empacará la herida con material quirúrgico. Esto lo ayuda a sanar y evita que el absceso vuelva a ocurrir.
Una vez finalizado el procedimiento, es probable que su médico le recete antibióticos para evitar que la herida se infecte.
Antibióticos
Los casos graves de abscesos cutáneos generalmente también se tratan con antibióticos. Su médico puede recetarle un antibiótico como dicloxacilina o cefalexina si tiene alguno de los siguientes síntomas:
- un absceso en la cara, que tiene un mayor riesgo de causar complicaciones
- celulitis
- más de un absceso
- un sistema inmune comprometido
Si su médico cree que el MRSA es la causa del absceso, puede recetarle clindamicina o doxiciclina para combatir la infección.
Después del tratamiento, el absceso no debe volver.
Como prevenir un absceso cutáneo
Es posible que no siempre pueda prevenir un absceso cutáneo. Sin embargo, hay formas de minimizar la posibilidad de contraer la infección por estafilococos que comúnmente conduce a un absceso. Para minimizar el riesgo de una infección por estafilococos:
- Lávate las manos regularmente.
- Limpie todos los cortes y raspaduras, incluso las pequeñas, con agua y jabón y aplique una pomada antibacteriana de venta libre.
- Mantenga sus cortes y heridas vendados.
También es mejor no compartir artículos personales, como toallas, sábanas, maquinillas de afeitar, equipos deportivos, maquillaje y ropa. Si tiene un corte o llaga, lave la ropa de cama y las toallas con agua caliente, detergente y lejía con regularidad y séquelas en el lugar caliente.