Visión general
El dolor en el pecho puede describirse como apretar o aplastar, así como una sensación de ardor. Hay muchos tipos de dolor en el pecho y muchas causas posibles, algunas de las cuales no se consideran graves. El dolor en el pecho también puede ser un síntoma de un ataque cardíaco. Si cree que tiene dolor en el pecho relacionado con un ataque cardíaco, debe llamar al 911 y obtener atención médica inmediata.
El vómito es la descarga forzada del contenido de su estómago a través de la boca. Las náuseas o el malestar estomacal generalmente ocurren antes de que una persona vomite.
Esto es lo que necesita saber para experimentar estos dos síntomas juntos:
¿Qué causa dolor en el pecho y vómitos?
Las siguientes son posibles causas de dolor en el pecho y vómitos:
Condiciones relacionadas con el corazón:
- infarto de miocardio
- angina de pecho
- miocardiopatía isquémica
- enfermedad cardíaca hipertensiva
Causas abdominales y digestivas:
- reflujo ácido o ERGE
- úlcera péptica
- gastritis
- cálculos biliares
- Hernia hiatal
Relacionados con la salud mental:
- trastorno de pánico
- ansiedad
- agorafobia
Otras causas:
- hernia
- hipertensión maligna (emergencia hipertensiva)
- delirio de abstinencia de alcohol (AWD)
- envenenamiento por monóxido de carbono
- ántrax
Cuando buscar ayuda médica
Busque ayuda médica inmediata si cree que un ataque cardíaco le está causando dolor en el pecho y vómitos. Llame al 911 o a los servicios locales de emergencia si experimenta esos síntomas junto con:
- dificultad para respirar
- transpiración
- mareo
- molestias en el pecho con dolor que se irradia a la mandíbula
- molestia en el pecho que se irradia a un brazo o los hombros
Consulte a su médico dentro de dos días si sus vómitos no disminuyen o si son severos y no puede retener los líquidos después de un día. También debe consultar a su médico de inmediato si está vomitando sangre, especialmente si está acompañada de mareos o cambios en la respiración.
Siempre debe buscar atención médica si le preocupa que pueda estar experimentando una emergencia médica.
¿Cómo se diagnostican el dolor de pecho y los vómitos?
Si experimenta dolor en el pecho y vómitos, su médico comenzará realizando un examen físico. También revisarán su historial médico y le preguntarán sobre cualquier síntoma adicional que pueda estar experimentando.
Las pruebas que pueden usarse para ayudar a determinar un diagnóstico incluyen una radiografía de tórax y un electrocardiograma (ECG o EKG).
¿Cómo se tratan el dolor de pecho y los vómitos?
El tratamiento dependerá de la causa de sus síntomas. Por ejemplo, si le diagnostican un ataque cardíaco, es posible que necesite una intervención inmediata para volver a abrir un vaso sanguíneo bloqueado o una cirugía a corazón abierto para redirigir el flujo sanguíneo.
Su médico puede recetar medicamentos para detener los vómitos y las náuseas, como ondansetrón (Zofran) y prometazina.
Los antiácidos o medicamentos para reducir la producción de ácido del estómago pueden tratar los síntomas del reflujo ácido.
Su médico también puede recetarle medicamentos contra la ansiedad si sus síntomas están relacionados con una afección de ansiedad como el trastorno de pánico o la agorafobia.
¿Cómo me cuido el dolor en el pecho y los vómitos en casa?
Puede perder una cantidad significativa de líquidos al vomitar, por lo tanto, tome pequeños sorbos de líquidos claros periódicamente para evitar la deshidratación. También puede consultar nuestros consejos para detener las náuseas y los vómitos.
Descansar puede ayudar a disminuir el dolor en el pecho. Si está relacionado con la ansiedad, puede ayudar respirar profundamente y tener mecanismos de afrontamiento disponibles. Estos remedios también pueden ayudar, si la situación no es una emergencia. Sin embargo, siempre debe consultar con su médico antes de tratar su dolor de pecho en casa. Pueden ayudarlo a determinar si necesita atención de emergencia.
¿Cómo puedo prevenir el dolor en el pecho y los vómitos?
Por lo general, no puede prevenir el dolor en el pecho y los vómitos, pero puede reducir el riesgo de algunas de las afecciones que pueden causar estos síntomas. Por ejemplo, comer una dieta baja en grasas puede reducir el riesgo de experimentar síntomas relacionados con los cálculos biliares. Practicar hábitos saludables, como hacer ejercicio y evitar fumar o fumar de segunda mano, puede reducir el riesgo de un ataque cardíaco.