¿Qué es una resonancia magnética de mama?
Una exploración por resonancia magnética (MRI) de seno es un tipo de prueba de imagen que utiliza imanes y ondas de radio para detectar anomalías en el seno.
Una resonancia magnética les brinda a los médicos la capacidad de ver los tejidos blandos dentro de su cuerpo. Su médico puede pedirle que se someta a una resonancia magnética de seno si sospecha que hay anormalidades en sus senos.
Por qué se realiza una resonancia magnética de mama
Una resonancia magnética de seno se usa para examinar sus senos cuando otras pruebas de imagen son inadecuadas o no son concluyentes, para detectar el cáncer de seno en mujeres con alto riesgo de desarrollar la enfermedad y para monitorear la progresión del cáncer de seno y la eficacia de su tratamiento..
Su médico también puede ordenar una resonancia magnética de seno si usted tiene:
- tejido mamario denso
- signos de cáncer de seno
- antecedentes familiares de cáncer de seno
- implante mamario roto o con fugas
- bulto en el seno
- cambios precancerosos en los senos
Las imágenes por resonancia magnética de los senos deben usarse con mamografías. Si bien las IRM de seno pueden detectar muchas anormalidades, hay algunos cánceres de seno que una mamografía puede visualizar mejor.
Los riesgos de una resonancia magnética de mama
Una resonancia magnética se considera una alternativa más segura a las exploraciones que usan radiación, como las exploraciones por TC, para las mujeres embarazadas. Si bien los niveles de radiación en las tomografías computarizadas son seguros para los adultos, no lo son para los fetos en desarrollo.
No hay evidencia que sugiera que los campos magnéticos y las ondas de radio en una resonancia magnética mamaria sean de alguna manera dañinos.
Si bien son más seguras que las tomografías computarizadas, las resonancias magnéticas de seno tienen algunas consideraciones:
- Resultados "falsos positivos": una resonancia magnética no siempre distingue entre crecimientos cancerosos y no cancerosos, por lo tanto, puede detectar masas que pueden parecer cancerosas cuando no lo son. Es posible que necesite una biopsia para confirmar los resultados de su prueba.
- Reacción alérgica al tinte de contraste: las imágenes por resonancia magnética utilizan un tinte inyectado en el torrente sanguíneo para que las imágenes sean más fáciles de ver. Se sabe que el tinte causa reacciones alérgicas, así como complicaciones graves para las personas con problemas renales.
Cómo prepararse para una resonancia magnética de mama
Antes de su MRI, su médico le explicará la prueba y revisará su historial físico y médico completo. Durante este tiempo, debe informar a su médico sobre cualquier medicamento que esté tomando o cualquier alergia conocida. Informe a su médico si tiene algún dispositivo médico implantado, ya que la prueba puede afectarlos.
Informe a su médico si ha tenido reacciones alérgicas previas al medio de contraste o si le han diagnosticado problemas renales. También debe informar a su médico si está embarazada, cree que podría estarlo o está amamantando. Las IRM de mama no se consideran seguras para las mujeres embarazadas, y las madres lactantes no deben amamantar a sus hijos durante aproximadamente dos días después de la prueba.
También es importante programar su resonancia magnética al comienzo de su ciclo menstrual. El mejor momento para esto es entre los días siete y 14 de su ciclo menstrual.
La máquina de resonancia magnética está en un espacio cerrado y estrecho, por lo que debe informar a su médico si es claustrofóbico. El médico puede darle un sedante para ayudarlo a relajarse. En casos extremos, su médico puede optar por una resonancia magnética "abierta", donde la máquina no está tan cerca de su cuerpo. Su médico puede explicarle mejor sus opciones.
Cómo se realiza una resonancia magnética de seno
Una máquina de resonancia magnética abarca una mesa plana que puede deslizarse dentro y fuera de la máquina. La parte redondeada, en forma de rueda, es donde los imanes y las ondas de radio emiten para producir imágenes de su seno.
Antes de su exploración, se pondrá una bata de hospital y se quitará todas las joyas y perforaciones en el cuerpo. Si está usando un tinte de contraste, se insertará una vía intravenosa en su brazo para que el tinte se pueda inyectar en el torrente sanguíneo.
En la sala de resonancia magnética, se acostará boca abajo sobre una mesa acolchada. Habrá depresiones en la mesa donde descansarán sus senos. El técnico lo deslizará dentro de la máquina.
El técnico le dará instrucciones sobre cuándo quedarse quieto y cuándo contener la respiración. El técnico estará en una habitación separada, observando monitores que están recolectando imágenes y, por lo tanto, estas instrucciones se darán por medio de un micrófono.
No sentirá que la máquina funciona, pero puede escuchar algunos ruidos fuertes, como chasquidos o golpes sordos, y posiblemente un zumbido. El técnico puede darle tapones para los oídos.
La prueba puede tomar hasta una hora. Una vez que se han grabado las imágenes, puede cambiar y salir.
Resultados de una resonancia magnética de mama
Un radiólogo revisará su resonancia magnética de seno, dictaminará los resultados de su interpretación y le dará los resultados a su médico, quien los revisará al recibir los resultados. Su médico se comunicará con usted para analizar sus resultados o para programar una cita de seguimiento.
Las imágenes de resonancia magnética son imágenes en blanco y negro. Los tumores y otras anomalías pueden aparecer como manchas blancas brillantes. Estas manchas blancas son donde el colorante de contraste se ha acumulado debido a la mayor actividad celular.
Si su resonancia magnética muestra que una masa podría ser cancerosa, su médico ordenará una biopsia como prueba de seguimiento. Esta es la extracción quirúrgica de una pequeña muestra de tejido del bulto sospechoso. Una biopsia ayudará a su médico a saber si el bulto es canceroso o no.