Síntomas similares
La dificultad para respirar y las sibilancias son síntomas de EPOC y CHF. Las dificultades respiratorias generalmente se experimentan después de la actividad física y tienden a desarrollarse gradualmente.
Al principio, puede notar la falta de aliento después de actividades simples como subir escaleras. A medida que empeoran la EPOC y la ICC, puede producirse dificultad para respirar o sibilancias con poco esfuerzo físico.
Una tos crónica es uno de los principales síntomas de la EPOC. La tos a veces puede provocar moco de las vías respiratorias enfermas. También puede ser una tos seca.
Las personas con CHF también tienden a tener tos seca que produce esputo. El esputo es un moco que también puede contener sangre, pus o bacterias.
La EPOC también puede causar opresión en el pecho. La ICC no produce opresión en el pecho, pero puede sentir que su corazón late de manera irregular o rápida en su pecho.
Orígenes diferentes
Si bien comparten algunos síntomas comunes, la EPOC y la ICC se desarrollan por diferentes causas.
La causa más común de EPOC es fumar. Un historial de tabaquismo no garantiza que tenga EPOC, pero aumenta la probabilidad de desarrollar problemas respiratorios. Fumar también es un factor de riesgo para enfermedades cardíacas y CHF.
Algunos casos de EPOC pueden estar relacionados con la inhalación de humo de segunda mano o la inhalación de productos químicos en el lugar de trabajo. Un historial familiar de EPOC también puede aumentar su probabilidad de desarrollar la afección.
La insuficiencia cardíaca puede ser causada por enfermedad coronaria (CAD). Esta enfermedad ocurre cuando los vasos sanguíneos del corazón se bloquean, lo que puede causar ataques cardíacos.
Otras causas de insuficiencia cardíaca incluyen enfermedades de las válvulas cardíacas, presión arterial alta y enfermedades del músculo cardíaco.
Tratamiento y estilo de vida
No hay cura para la EPOC o la ICC, por lo que el tratamiento tiene como objetivo retrasar la progresión de las enfermedades y controlar los síntomas.
Debido a que fumar puede contribuir a la EPOC y la ICC, dejar de fumar mejorará su salud, independientemente de su condición.
La actividad física regular es importante para fortalecer el corazón y los pulmones, pero tanto la EPOC como la CHF pueden limitar los tipos de ejercicios que puede hacer. Hable con su médico sobre las actividades que son seguras y las precauciones que debe tomar antes y durante el ejercicio.
Se usan diferentes medicamentos para tratar la EPOC y la ICC.
EPOC
Un medicamento común para la EPOC es un broncodilatador. Este medicamento relaja los músculos alrededor de las vías respiratorias y facilita la respiración.
Los broncodilatadores de acción corta pueden durar hasta seis horas y, por lo general, se recomiendan para los momentos en que eres más activo. Los broncodilatadores de larga duración pueden durar hasta 12 horas y se usan todos los días.
La gravedad de su EPOC determinará qué tipo de broncodilatador es mejor para usted.
Si tiene EPOC grave, también puede necesitar glucocorticosteroides inhalados. Estos son esteroides que ayudan a minimizar la inflamación en las vías respiratorias.
CHF
La ICC puede implicar el uso de varios medicamentos. Los vasodilatadores ayudan a su corazón al ensanchar los vasos sanguíneos y disminuir la presión arterial. Esto ayuda a reducir la carga sobre su corazón. Los betabloqueantes pueden reducir la frecuencia cardíaca y reducir la carga sobre el corazón.
Otros medicamentos clave incluyen diuréticos, que reducen la cantidad de líquido y sodio en su cuerpo. También pueden ayudar a bajar la presión arterial.
Un medicamento llamado digoxina fortalece las contracciones cardíacas. Puede ser una parte importante del tratamiento de CHF si otros medicamentos no son útiles, o si tiene un ritmo cardíaco anormal como la fibrilación auricular.
Los medicamentos anticoagulantes también se pueden usar para tratar la CHF. Estos medicamentos pueden ayudar a reducir el riesgo de coágulos sanguíneos. Para los casos de ICC y EPOC graves, a menudo se usa oxigenoterapia. Esta terapia lleva oxígeno a los pulmones a través de un tubo en la nariz.
Prevención
La principal medida preventiva para evitar la EPOC es no fumar nunca o dejar de fumar. Muchos productos y terapias pueden ayudar a las personas a dejar de fumar. Pregúntele a su médico acerca de estos métodos o busque programas en su comunidad o en su hospital local.
No fumar también puede ayudar a preservar la salud del corazón. Otros pasos para ayudar a reducir su riesgo de CHF incluyen:
- Controlar la presión arterial y el colesterol, ya sea a través de medicamentos o cambios en el estilo de vida.
- hacer ejercicio la mayoría de los días de la semana
- comer una dieta baja en grasas saturadas, azúcares agregados y sodio
- Comer una dieta rica en frutas, verduras y granos integrales.
Tener chequeos regulares y seguir los consejos de su médico también puede ayudar a prevenir la EPOC, la ICC y otros problemas de salud graves.
panorama
La EPOC y la ICC son afecciones graves que afectan su respiración y pueden afectar su actividad en la vida. Aunque ambos tienen síntomas y factores de riesgo similares, la EPOC afecta los pulmones y la ICC afecta el corazón.
Se usan diferentes medicamentos para tratar cada condición. Sin embargo, comer sano, hacer mucho ejercicio y dejar de fumar son buenos tratamientos para ambos.